Los abogados defensores del primer denunciante víctima de una de las presuntas estafas cometidas por una organización que promovía la adquisición de la llamada ‘One Coin’, una supuesta criptomoneda de la empresa One Life, esperan que tras la feria judicial la fiscalía resuelva si se le dicta la prisión preventiva a los detenidos, acusados de asociación ilícita y estafa reiterada en concurso real.
“Conforme a la pr ueba de la causa, es probable que se dicte dicha medida, porque advertimos riesgo procesal concreto por la gravedad de los delitos atribuidos. Se suma a ello que hay mucha prueba pendiente que puede ser alterada, testigos, victimas que aún no han podido prestar declaración, gente que podría llegar a los inversores para influenciarlos en algún sentido, otros posibles ‘operadores’ que están en libertad y fuertes conexiones de los imputados con personas de otros países”, señala Pedro Eugenio Despouy Santoro, abogado patrocinante y querellante en la causa junto a Eduardo y Martín Capdevila.
En se sentido, el abogado sostuvo que han sido consultados por otras víctimas que quieren sumarse a la denuncia penal inicial. “Algunas de ellas refieren que, además de las inversiones en supuestas criptomonedas, habrían sido defraudadas con la promesa de entrega de otros productos que alguno de los promotores prometía a cambio de una suma de dinero”. Muchos de los contactos que reciben los abogados provienen del interior del país.
“De la prueba colectada surgen nombres de personas que habrían tenido también una participación activa en la captación de otras víctimas que habrían depositando dinero en cuentas bancar ias en las que se indicaban que debían entregarlo para concretar las inversiones”, sostuvo el profesional, poniendo de manifiesto que en Córdoba -hasta el momento- se habla de unos 1.500 afectados, “que mediante ardid y engaño fueron entregando a esta organización importantes sumas de dinero”.
¿Recuperar el dinero? Aunque por el momento resulta dificultoso establecer el monto de dinero involucrado en las operaciones que se concretaron -desde la fiscalía tratan de dilucidar el movimiento de fondosDespouy Santoro señaló a PERFIL CÓRDOBA que “pensamos que es difícil para las víctimas, pero no imposible, intentar recuperar el dinero entregado”.
Algunos de los denunciantes, como el primero que presentó una denuncia, aseguró haber invertido US$70 mil en la supuesta criptomoneda.
Prueba presentada. Según el abogado “fue abundante” la prueba que acompañaron con la denuncia. Por caso, puede escucharse un audio que una de las imputadas reenvió al grupo de WhatsApp donde participaban los inversores.
“Allí, uno de los presuntos jefes de la asociación ilícita comentaba que había abierto países -Chile, Paraguay, Uruguay- para comprar y comercializar criptomonedas One Coin. Se habla de miles de euros (400.000) en ganancias que una de las personas representante de OneLife (Jorge Gordo, actualmente prófugo) cobraba desarrollando este emprendimiento con estas supuestas criptomonedas”, sostuvo Despouy Santoro.
El abogado sostiene que en la prueba se cuenta sobre los eventos que se realizaban, la gente que se incorporaba, los rangos jerárquicos (denominados diamantes, rubíes y zafiros) de quienes trabajaban para la supuesta compañía.
“Este líder de la banda habla también de la supuesta compra de vehículos, propiedades, viajes y cuantiosas ganancias mensuales. Es decir, todo habría sido una puesta en escena que aparentaba en todo momento la existencia de una empresa sólida y emprendedora. Fue parte de este ardid una cena que se hizo en un conocido restaurante de Puerto Madero, que pagó quien sería el líder de la asociación en Argentina, asombrando a los comensales”, señala el abogado.
Previo a formular la denuncia, el representado de Despouy Santoro y Eduardo y Martín Capdevila, “hizo varios requerimientos notariales que hubiesen permitido, quizás, no llegar a la instancia penal. Pero esta gente, lejos de dar la cara y devolver el producto del delito, ningún interés tuvo de solucionar el conflicto”.
“Es más, por si ello fuera poco, durante 2020 algunas de las mismas personas que hoy están imputadas, aparentemente renovando el agotado proyecto OneCoin, estuvieron promocionando la nueva criptomoneda ecológica Seven Coin, reconvirtiendo, al parecer, el anterior emprendimiento defraudatorio de las One Coin investigado por la fiscalía de delitos complejos a cargo del doctor Enrique Gavier”, finalizó Despouy Santoro.
