Comienzan a cimentarse aún más las sospechas de que existió una ruta que unió el funcionamiento de la financiera ilegal CBI Cordubensis SA con hechos de corrupción cometidos, se presume, desde el Ministerio de Planificación de la Nación del kirchnerismo, durante la gestión de Julio de Vido y de José López, mientras fue secretario de Obras Públicas.
El arrepentido Miguel Vera, próximo a enfrentar el primer juicio, y sus socios Joaquín Juana y Teófilo Grant –imputados recientemente en un expediente desglosado– tendrán que explicar por qué razón “compraron” los cheques que monetizaron en el Banco Nación a través de cuentas pertenecientes a dos empresas fantasma, Jotemi SA y Halabo SA. Ambas estaban exentas de tributar el impuesto al cheque porque declaraban actividades alcanzadas con ese beneficio.
PERFIL CORDOBA accedió al listado de cheques informado a la Justicia por la entidad financiera, que fueron depositados entre octubre del 2012 y febrero del 2014, cuando se produjo la debacle de CBI.
Entre los cheques, figura uno de Esuco SA, propiedad del extitular de la Cámara de la Construcción, Carlos Wagner, imputado colaborador en la denominada Causa de los Cuadernos. Es por $118.052,43. Fue librado el 4 de diciembre de 2012 y depositado en Banco Nación el 22 de enero del año siguiente.
Wagner fue el primero en hablar de coimas en la causa cuando comenzaron las detenciones ordenadas por el juez federal Claudio Bonadio. Hasta ese momento, algunos de los empresarios imputados y detenidos se arrepentieron al admitir “aportes de campaña” para justificar el pago de coimas.
Wagner, en cambio, relató su amistad con De Vido. Contó que en 2004 lo citó en su despacho y le dijo que por orden del presidente (Néstor Kirchner) debía garantizar el éxito de las licitaciones públicas, en especial en el rubro vial porque “la obra pública iba a ser uno de los métodos de recaudación de dinero para los gastos políticos”, según publicó el diario La Nación.
En el listado de cheques de Jotemi hay otros dos que pertenecen a Rovella Carranza. La empresa fue una de las más beneficiadas en las licitaciones de obras viales, entre 2003 y 2014 por $16.806 millones. De ahí su mención en los inicios de una causa que investigó el fiscal federal, Federico Delgado, en relación con incremento injustificado del patrimonio de López.
El expediente ya fue elevado a juicio por el juez Daniel Rafecas, pero la empresa quedó libre de reproches penales.
Rovella Carranza libró dos cheques que fueron depositados en la cuenta de Jotemi: uno por $118.671,36 el 21 de septiembre de 2012, que fue depositado el 19 de diciembre del mismo año; y otro por $130.758,89 emitido el 4 de abril de 2013 y monetizado el 22 de mayo.
Supermercado. La financiera CBI funcionaba como un gran “supermercado de dinero”, tal como la definió en las indagatorias su expresidente Eduardo Rodrigo, aún detenido. Compraba los cheques y pagaba menos del valor nominal. Allí radicaba el negocio. Articularon con Jotemi y Halabo una operatoria y así, al evadir el impuesto al cheque, la porción de ganancias era aún mayor.
Ahora, ¿a quiénes compraban esos documentos? ¿Y quiénes financiaban con dinero en efectivo la actividad? La primera respuesta puede encontrarse si se determina quiénes fueron los emisores de los cheques y si tuvieron o tienen alguna vinculación con hechos de corrupción que están siendo investigados.
La lista es una de las pruebas incorporadas por el Tribunal Oral Federal 2, que en ocho días iniciará el primero de una serie de juicios por la financiera CBI. Una fuente consultada por este medio explicó que “es un elemento importante para valorar junto a todos los demás en el juicio y poner luz a los hechos”. Quizás allí se encuentre la respuesta al segundo interrogante.
Otra fuente interpretó que estos nombres son tan solo “un botón de muestra” de todo lo que realmente se movió en CBI.
Osecac. Hay 64 cheques de la Obra Social del gremio de Comercio que ingresaron a la cuenta de Jotemi SA. por montos que van de $12 mil a $1,8 millón. Armando Cavalieri, titular del gremio, está imputado en un expediente que se desprendió de la causa principal de CBI.
MUNICIPIOS, CEREALERAS, PRIVADOS Y GREMIOS
Son 317 los cheques de más de $100 mil depositados por Jotemi SA y Halabo SA en Banco Nación, que fueron incorporados como prueba a la causa CBI por el Juzgado Federal 3.
La mayoría son por montos de hasta $400 mil y pocos son por cifras más altas, de hasta $1,7 millón. En la lista confeccionada figuran varios municipios como libradores de cheques: Deán Funes, Monte Maíz, Villa María, Pilar, Villa Carlos Paz y Caleta Olivia. Hay valores de la empresa municipal Crese y de la prestataria Cotreco.
Figura en la nómina un fideicomiso de administración y garantía de un importante gremio estatal provincial. También hay empresas constructoras, algunas con contratos actuales para obras en la Ciudad y la Provincia de Córdoba.
Hay concesionarias y una empresa que la justicia federal de Villa María investigó por evasión impositiva en 2011, el Grupo Transpatagonia.