Si bien esta semana ocupó el centro de la escena la presentación del Presupuesto Provincial 2019, en los últimos días también se dio un hecho que tendrá gran trascendencia para el ecosistema de Córdoba y de todo el país. En efecto, a iniciativa del Ministerio de Finanzas cordobés, la Provincia y la Nación (representada por la AFIP, en este caso) avanzan en un modelo de “simplificación del sistema tributario a partir de la unificación de impuestos entre jurisdicciones”.
El anticipo lo realizó a PERFIL Còrdoba el ministro Osvaldo Giordano. El diseño persigue una reducción de la presión impositiva real por una doble vía: reducción del número de trámites y costos burocráticos para cumplir con las obligaciones tributarias de tres niveles de gobierno y rebaja de tasas que recaen sobre la actividad a escala municipal. El siguiente es el diálogo que mantuvo este medio con el ministro Giordano.
-¿De qué se trata el modelo de simplificación tributaria que le propusieron a la AFIP?
- Nosotros entendemos que hay que terminar con esto de que el pobre contribuyente tiene que lidiar con tres administraciones tributarias para cumplir con sus obligaciones. En ese sentido, el modelo del Monotributo Unificado de Córdoba es el camino. Ya se lo hemos planteado a la AFIP, con quienes tenemos muy buena relación, y ellos acuerdan en que por ahí va la cosa. Ahora le propusimos replicar la experiencia del Monotributo Unificado, que sólo llega a los contribuyentes más pequeños, al resto del universo. Esto significa unir el cobro de Ingresos Brutos con IVA y tasa municipal. Pero, no sólo, también unificar el impuesto Inmobiliario con Bienes Personales y, de igual modo, los impuestos de las tres jurisdicciones que recaen sobre automotores. Se pueden cobrar de una vez y ya el Estado se arregla sobre la forma en que los distribuye entre las diferentes jurisdicciones. (NdR: cabe recordar que el Monotributo Unificado Córdoba -MUC- permite abonar en una sola vez el tributo nacional e Ingresos Brutos local).
-Para tener una referencia de hacia dónde va esto: ¿Cuáles son hasta ahora los resultados del Monotributo Unificado?
- Con el régimen simplificado, el padrón de contribuyentes obligados al pago creció de 110.000, en enero de 2018, a 160.000 en octubre pasado. Aumentó un 50% el padrón y en alrededor de 30% la recaudación. Ese es el impacto para el Estado. Pero, además, quien lo paga tiene un tercio de la burocracia que tenía antes. Dado los beneficios, a mí me sorprende que la Municipalidad de Córdoba todavía no haya adherido a esto. Se sumaron unos 130 municipios, entre los que están ciudades grandes como San Francisco, Rio Cuarto, y la Capital todavía no lo tiene.
-¿Cuál es el argumento por el que Mestre se opone?
-El argumento es económico. Ocurre que los pequeños contribuyentes en la Ciudad de Córdoba pagan mucho; tienen una suma fija alta como contribución sobre la actividad. Para entrar en este modelo simplificado no podemos seguir con ese descalabro, deben bajar esa alícuota. A muchos municipios que adhirieron les pasó eso, pero aun rebajando la alicuota compensaron la recaudación con la ampliación de la base imponible.
-La simplificación tributaria, entonces, no sólo reduce los trámites sino que presiona indirectamente a una baja de la presión impositiva total. ¿Es así?
- Totalmente. La presión impositiva baja por plata y por reducción de burocracia. Imagínese lo que es para las empresas que venden en todo el país tener que lidiar con la AFIP por el IVA, con Rentas de cada provincia por Ingresos Brutos en el marco del Convenio Multilateral, y a eso agréguele la Municipalidad. La simplificación es un modelo que da respuesta a esto. Siguiendo la experiencia de Córdoba, en diciembre arranca en Mendoza el Monotributo Unificado. Los funcionarios nacionales están muy entusiasmados con esto. Si llegamos a unir Ingresos Brutos, IVA y tasa municipal, se dará un cambio paradigmático por el volumen de recaudación que implica.
-¿Podrán lograr ese objetivo en un año electoral? ¿Hasta dónde puede llegar la sintonía que tienen con la Nación?
- No es que seamos amigos; con Anses yo tuve discusiones muy fuertes. Lo que sí hay es una decisión de gestionar porque en el medio queda la gente. Todo depende de la visión de estadista y de responsabilidad de los funcionarios. Puedo ser del PJ o de Cambiemos, el punto es tener la visión racional de comprender los beneficios que puede generar el sistema simplificado. Por eso, Cambiemos en Buenos Aires lo aprueba y Cambiemos en Córdoba lo desaprueba. No es un tema ideológico, sino de sentido común; ahí es donde se nota lo que es un estadista y nuestro intendente.
“NO NIEGO QUE CON ESTE GOBIERNO MEJORÓ LA DESCENTRALIZACIÓN DE LOS RECURSOS”
A medida que se va consolidando la aplicación nacional del Consenso Fiscal (proceso en el que Córdoba es una de las jurisdicciones más cumplidoras), empiezan a abrirse nuevos y grandes desafíos para la relación Nación-Provincia. “Queda todo por hacer”, resalta Giordano.
-Pasado un año que fue intenso en la relación Nación-Provincias, ¿el esquema sigue siendo inequitativo?
-No niego que con este Gobierno ha mejorado la descentralización de recursos, frente al pico de centralismo que hizo el Gobierno anterior. De todos modos, hay que decir que esto se dio porque hubo un fallo de la Corte de por medio, que lo forzó. También es cierto que ellos podrían haber demorado la devolución del 15% de coparticipación al resto de las provincias y sin embargo lo están haciendo. Esto hay que reconocerlo.
Ahora, mi impresión es que si la Nación no desmonta el sobredimensionamiento de su estructura que sirve para meterse en todas áreas que son de competencia de las provincias, nos va a seguir pasando lo que nos pasa. Esto es: entran en déficit fiscal, generan inflación, una fuerte crisis y terminamos yendo todos para atrás. Haber puesto de nuevo las retenciones es una manera de volver a sacar lo que te habían dado, porque las retenciones no se coparticipan. Si no hay una decisión más estructural de dar sustentabilidad fiscal al Estado nacional, por más que tengan vocación de seguir descentralizando recursos no lo van a poder hacer.
-¿Hacia dónde debería ir la relación Nación-Provincias, en una próxima fase, para resolver las inequidades que sobreviven?
- Hay que salir de la idea de que vamos a encontrar un conjunto de porcentajes mágicos que va a dejar contentos a todos. Lamentablemente, la suma da 100 y es imposible que dé 101. Si seguimos discutiendo sobre la base de que todos queremos llevarnos un poco más y nadie quiere volver a casa pasando a la historia como el que entregó la coparticipación de su provincia, nunca vamos a consensuar. Hay que ir a otro camino. La Nación debe dejar de cogestionar con las provincias para que tenga más espacio fiscal; es decir, para que pueda ceder recursos que hoy destina a cosas que no le corresponden y que interfieren en la gestión de las provincias.
-¿En ese esquema cuál es el rol que debiera tener el sistema de coparticipación?
-Hoy, el sistema de coparticipación es muy arbitrario. Deberíamos tender a que las provincias se hagan más cargo de su recaudación y que sean autosustenables. La coparticipación debería quedar como algo más chico de lo que es actualmente, y destinada a compensar a las provincias más pobres. El 70% de los ingresos se generan en las provincias centrales más grandes; esas provincias no necesitan que la Nación le recaude y luego les mande los fondos, sino que ellas mismas podrían recaudar, y después determinarse el esfuerzo a hacer para compensar a zonas desfavorecidas. En síntesis, deberíamos ir a una coparticipación más chica y menos perversa que la que tenemos hoy.
“ME SORPRENDE QUE HABLEN DE IMPUESTAZO”
Tras la presentación del Presupuesto en la Legislatura, el martes pasado, se abrió una fuerte corriente crítica en torno a la pauta tributaria con la que el Gobierno proyecta nutrir sus ingresos en el 2019. “Me sorprende que hablen de impuestazo porque habrá una reducción efectiva de impuestos”, argumenta el ministro Giordano. Y fundamenta: “En relación a los ingresos totales, este año la baja de Ingresos Brutos fue de 1,4% y el año que viene se van a retraer otros 2,3 puntos”. Esto indica que desde el inicio del cumplimiento del Consenso Fiscal la merma de Ingresos Brutos en relación a ingresos totales es del 3,7%. En 2019, esta estrategia hará que en la economía fluyan unos $6.200 millones que antes los absorbía el fisco. Sin embargo, por el lado del Impuesto Inmobiliario habrá aumentos promedio del 36%. Aún en ese caso, según Giordano, el “incremento va a estar por debajo de la inflación”. Además, este tributo ofrece importantes reducciones por “contribuyente al día” (-30%), “cuota única” (-15%) y “pago online” (-5%). Otro punto de interés para las empresas que surge de la estrategia tributaria 2019 es que la devolución automática de los saldos a favor del contribuyente, en ningún caso, podrá exceder los seis meses desde la presentación de la solicitud.