No es casual el lugar en el que se originó el brote de este nuevo tipo de virus Covid-19, que comenzó a infectar a los seres humanos. El lugar de origen es el mercado húmedo mayorista de mariscos de Wuhan al norte del río Yangtsé, responsable del suministro de una amplia variedad de animales silvestres vivos como ranas, serpientes, erizos, murciélagos, entre otros.
Es cultural que su alimentación sea a partir de animales vivos que luego se cocinan o no. Creen que es mayor el aporte nutritivo.
Ecológicamente, la invasión a ambientes naturales, la extracción y manipulación de especies exóticas es lo que puede generar que el virus hospedado en especies animales silvestres en equilibrio, comience a infectar y afectar a las personas.
¿Cuándo? Cuando el hombre irrumpe en este ambiente natural de los animales, ya sea por necesidad o por placer de cazar o tener una mascota exótica, los virus realizan un salto de especie e infectan a las personas.
La ciudad de Wuhan, ubicada aproximadamente en el centro de China, es un nodo central de redes de transportes terrestres y aéreos, se movilizan millones de personas dentro de China, llegan o salen hacia otros destinos. El virus se propaga rápidamente a diferentes partes del globo junto con el viajero.
La fecha del 25 de enero propició un gran flujo de paseantes para festejar el año nuevo chino lunar. Todo esto es una mezcla muy buena para que se generen nuevas especies variantes.
Aun así, esta infección mantiene la prevalencia del 2 a 3% esperada de enfermedad.
En ese marco, ¿es una amenaza real Covid-19 para todo el planeta?
Este invierno en nuestro hemisferio quizás no sea el Covid-19 el brote epidémico mayor -aunque como es impredecible, no habría que subestimarlo- pero sí de otros respiratorios graves conocidos como son virus Influenza (VI) con una prevalencia aproximada de 7% que causa neumonías graves y fatales en niños y ancianos y el virus respiratorio sincicial (VRS) con una prevalencia aproximada de 30% que causa bronquiolitis, asma y casos fatales en niños menores de 2 años, y que arrojan las mayores prevalencias de enfermedad y muerte cada invierno en el mundo.
Las enfermedades que afectan a las vías respiratorias son múltiples y la mayoría comienza con los mismos síntomas: tos, fiebre, mocos, estornudos, dolor de cabeza. Varios virus diferentes pueden ocasionar desde resfriados comunes hasta neumonías graves y fatales.
La familia Coronaviridae posee cuatro géneros y muchas especies que causan diversas enfermedades. La mayoría de ellos infecta a animales. Hasta 2019 había solo seis que infectaban a humanos, y en diciembre apareció el séptimo que infecta humanos, Covid-19.
Además, existen los “grandes propagadores”, personas que están en el período de incubación de la infección, una etapa silente. Así, el infectado puede contagiar a otros antes de que comiencen a manifestarse los primeros síntomas.
Un grave problema en todas las infecciones respiratorias. Estas enfermedades afectan a todas las personas, la mayoría de los casos se resuelven satisfactoriamente.
Entre los fallecidos por la infección en Wuhan y en las demás regiones, la mayoría son mayores de 65 años, con enfermedades de base que complican el cuadro (hipertensos, inmunosuprimidos, oncológicos, enfermos cardíacos o renales, etc.).
El tema de la gestión de políticas públicas sanitarias destinadas a la investigación en salud es central para el tratamiento y prevención de enfermedades.
Con este brote, el tema está en la agenda y es parte de las prioridades en el Ministerio de Salud de Argentina. Ahora la epidemia se ha visibilizado. Aunque no es aquí, igualmente mueren personas, con distintas pautas culturales y religiosas, con una idiosincrasia propia.
El Ministro de Salud declaró que estamos en alerta epidemiológica, aunque todavía no hay notificaciones de esta enfermedad. Las prioridades son el dengue y el sarampión que hay casos, y el coronavirus está bajo la lupa, sin casos confirmados.
Entonces, finalmente, contestando a la pregunta inicial: debemos estar atentos, alertas, cuidarnos, mantener los consabidos hábitos preventivos contra las infecciones respiratorias, ante amenazas reales de infecciones respiratorias tan o más graves que Covid-19 como la gripe en niños y adultos mayores y la bronquiolitis o neumonías fatales en niños menores de 2 años.
Alicia Cámara es bióloga y doctora en Ciencias Biológicas. Profesora Asociada DSE Laboratorio de Virus Influenza y Otros Virus Respiratorios. Coordinadora del Programa Continuo de Extensión Instituto de Virología Dr. J. M. Vanella, InViV-FCM-UNC.
