El ‘banquete cordobés’ para Massa y Milei: 1,2 millones de votos sueltos en disputa
En el 2015, la Provincia fue protagonista central de la elección consagrando presidente a Mauricio Macri, que aquí obtuvo el 71% de los votos. Hoy, el escenario ofrece algunas similitudes pero presenta otras particularidades: es el distrito con el mayor porcentaje de “votos sueltos”.
Los elogios entre Massa y Milei y la apuesta de ir a una segunda vuelta. |
Cedoc
Un voto cotiza alto y los candidatos lo pelean como si fuera el último. Córdoba es el tercer distrito nacional en cantidad de votantes y suele definir elecciones, como en 2015. Y en esta esta elección la provincia asoma como ‘decisiva’ tomando en cuenta los resultados del pasado 22 de octubre, ya que más de 1,2 millones de personas deberán cambiar su elección: ahora podrán elegir a Javier Milei (La Libertad Avanza), optar por Sergio Massa (Unión por la Patria), votar en blanco o anular su voto.
Los votantes de Juan Schiaretti, Patricia Bullrich y Miriam Bregman se encuentran ‘huérfanos’. Mucho se analiza por estas horas adónde van esos votos o cómo se pueden cazar por parte de quienes se enfrentarán en el balotaje el 19 de noviembre. Pero lo cierto es que Córdoba es el mayor distrito, en porcentaje, con cantidad de “votos sueltos”: el 53%, tomando como base a la sumatoria de sufragios conseguidos por los tres candidatos que no estarán en la contienda final.
El banquete cordobés
Los votos de Córdoba son importantes para ambos candidatos. Pero a diferencia de lo que pasó en el 2015 no tendrían el mismo peso en el mapa nacional.
Los votos de Schiaretti son muy cotizados a nivel nacional, ya que representan casi el 7% de los sufragios registrados en primera vuelta. Según un sondeo de la Consultora CB y otro que maneja como referencia la Municipalidad de Córdoba, el 42% de los votos de Hacemos Unidos por Nuestro País se irían a Massa y el 41% a Milei. Muy peleado.
Para Cristian Buttié, Milei y Massa duplicarán su caudal electoral en la provincia. El libertario podría alcanzar hasta el 70,9% y el peronista que no quiere ser kirchnerista el 29,1%. Conviene detenerse aquí para ver las similitudes con 2015: Macri obtuvo el 71% y Daniel Scioli el 28,48%. El fundador del PRO revirtió el resultado de la general y se consagró presidente con el 51,34% de los votos.
En esa elección, Córdoba fue clave, ya que le aportó a Juntos por el Cambio el 71% de la preferencia provincial, lo que significó un total de 1.546.831 sufragios. Daniel Scioli obtuvo 616.002 en este distrito.
La diferencia, continuando la comparación con esa elección, fue Provincia de Buenos Aires: en aquella elección Macri perdió en ese distrito por apenas 200.000 votos. Hoy, los números muestran a Massa consolidado en el primer puesto, con una diferencia que para muchos resultaría decisiva. En las PASO y primera vuelta, Milei se ubicó tercero.
Seguramente los votos cordobeses que pueda conseguir el ministro-candidato no implicarán una derrota nacional, pero no alcanzar “la fórmula del fernet” (70-30) sí se puede convertir en una amenaza para sentarse en sillón de Rivadavia.
¿Adónde caza cada candidato?
Para los relevamientos de votos, durante la semana híper convulsionada que pasó, Milei se llevaría casi el 80% de los votos conseguidos por Juntos por el Cambio y la mitad de los cordobeses que eligieron a Juan Schiaretti. Buttié completa el análisis estimando que Sergio Massa podría quedarse con el 27% de los votos de Hacemos Unidos por Nuestro País.
Para otras consultoras, el reparto es más parejo y los más de 600.000 sufragios del gobernador se distribuyen casi de manera similar entre libertarios y massistas.
El voto en blanco o nulo alcanzaría el 8% y sólo el 5.4% aún se muestra indeciso.
