La medida, que rige desde el 19 de este mes, abarca a los concursos de antecedentes y oposición a partir de los cuales surgen las nóminas de aspirantes a cargos definitivos, interinos o suplentes de secretarios de las Fiscalías de Instrucción y Ayudantes Fiscales en la Dirección de Sumarios y Asuntos Judiciales de la Dirección General de Policía Judicial.
Hasta ahora se ejecutó el primer tramo de los concursos. Los postulantes rindieron el examen teórico-práctico, ya fueron evaluados por el Tribunal Examinador y hubo resolución a las observaciones que se presentaron. A partir de ahí, debería proceder la entrevista personal, instancia que fue cuestionada por “subjetiva” y “arbitraria” permitiendo modificar los totales en las calificaciones y, por lo tanto, los órdenes de mérito.
Si bien la resolución no lo dice, fuentes calificadas explicaron a PERFIL CÓRDOBA que al evaluar esos cuestionamientos se decidió eliminarla para acotar al máximo el margen de arbitrariedades. En el decisorio del fiscal General Delgado se puede leer como argumento para prescindir de la entrevista que genera dispendio de tiempo, disponibilidad de recursos materiales y humanos que es posible evitar.
Esto no le gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
“Aun cuando el desarrollo de las entrevistas personales aporta un significativo valor al proceso de selección y promoción del personal a los cargos de mención, en esta coyuntura se estima necesario priorizar la consolidación de los órdenes de mérito de tales concursos y la inmediata disponibilidad para la cobertura de los cargos concursados conforme a las apremiantes necesidades de servicio, dejando sin efecto la etapa de Entrevista Personal, con carácter general para todos los postulantes”, sostiene.
Cabe aclarar que los cargos de funcionarios en Fiscalía General y en el Tribunal Superior de Justicia no se concursan. Ante una consulta de PERFIL CÓRDOBA, la explicación fue que en las cabezas del Ministerio Público Fiscal y el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) los magistrados tienen funcionarios –con cargo de secretariosque eligen para las tareas específicas que abarcan sus especialidades, con perfiles que respondan a ellas. Es el motivo por el cual no se eligen por concurso.
