Los últimos días de la semana tuvieron en agenda las distintas versiones en torno a los cambios en el gabinete del presidente Mauricio Macri. Y uno de los nombres que sonó fue el del diputado nacional y candidato en la lista de Juntos por el Cambio en Córdoba, Mario Negri. Versión y posibilidad que en el entorno del radical descartan por completo.
Los que conocen a Negri afirman que se agradece la oportunidad, pero que no es el momento. “Encabeza la lista en la única provincia que se ganó el domingo. Sería irresponsable pasar a ser ministro y tener que abandonar la campaña”, razonaron cerca del líder del interbloque oficialista en Diputados.
Negri y la senadora del PRO y jefa de campaña, Laura Rodríguez Machado, fueron los dos dirigentes de la coalición que estuvieron en Buenos Aires en los últimos días; y al diputado no le había llegado en ningún momento un llamado oficial. Solo eran versiones que lo ubicaban en un eventual enroque como ministro del Interior, en caso de que Rogelio Frigerio tuviera que reemplazar a Nicolás Dujovne en Hacienda, lo que quedó descartado tras la designación de Hernán Lacunza en esa cartera.
Pases de factura por la fiscalización. Los 18 puntos de ventaja que le sacó Macri a Alberto Fernández en el único distrito que ganó el oficialismo el domingo pasado no alcanzaron para calmar los ánimos en la interna de los socios cordobeses. Los pases de factura durante la semana por la fiscalización, como así también por la campaña, estuvieron a la orden del día.
Incluso aquellos que transitan las reuniones de Cambiemos en Córdoba reconocieron que fueron varios los enojos y se tomaron algunas decisiones, entre ellas, desactivar por completo los grupos de WhatsApp como herramienta de campaña. Más de un candidato se mostró molesto con esto y pidió que se vuelva a la calle, dejando el escenario virtual de lado.
Los enojos por la fiscalización son los que siempre enfrentaron al radicalismo con el PRO, al punto que el macrismo apuesta a poner fiscales propios en capital y provincia en octubre porque empezó a dudar de la UCR y el Frente Cívico.
“A pesar de la derrota, la gente se empezó a sumar para fiscalizar. El rechazo a CFK se mantiene en Córdoba”, dijeron en la semana en el entorno de un integrante de la lista de diputados. A esto se suma el escaso respaldo que -creen- tuvo Macri en la semana más dura después de las PASO.
“Los radicales, que eran los primeros en sacarse la foto, ahora quieren tomar distancia”, razonó un macrista ante la consulta de PERFIL CORDOBA.
