Belgrano y Talleres no solo sorprenden en los torneos de fútbol femenino de AFA por sus resultados deportivos, sino también por el acompañamiento del público que asiste a los partidos cuando juegan de local. Un número que aumenta fecha a fecha y que refleja unas lógicas de aliento muy diferentes al masculino. Una evolución.
Las ‘Piratas’ juegan habitualmente en el Gigante de Alberdi y asiste un promedio de más de tres mil personas por partido, algo inédito en AFA y más en el ascenso. En las tribunas se pueden ver mujeres, hombres, niñas, niños, adolescentes, familiares, gente a la que le gusta el fútbol, gente a la que no pero que apoyan la ‘revolución’. Sí: para muchas personas es una revolución lo que están produciendo las futbolistas. “En sus botines llevan revolución”, cantan.
A propósito de cánticos: no los hay xenófobos ni homófonos, algo, lamentablemente, habitual en los estadios de fútbol. Muchas de las canciones están adaptadas. La mayoría de esas entonaciones son de aliento y casi no hay agresiones a los rivales. El ‘casi’ es porque siempre hay excepciones a la regla.
En Talleres la lógica es igual. Las ‘Matadoras’, en su debut afista, están jugando de local en el predio Amadeo Nucetelli, aunque el presidente Andrés Fassi anunció hace unas horas que el proyecto es que jueguen en la Boutique la próxima temporada. En la ‘T’ proyectan que si la localía se muda a barrio Jardín serán miles, también, los que acompañarán.
Este fenómeno, que lejos está de ser una moda, va en aumento. Córdoba ha sido pionera en muchos aspectos en esta disciplina. Desde 2012, en la Liga Cordobesa los equipos llevaron mucha gente. Sin embargo, la mayoría recuerda que hubo un click el 30 de noviembre de 2019. Ese día, en el estadio de Medea, se disputó la final de la Copa Córdoba entre Belgrano y Talleres y la cancha estuvo llena.
“Cuando llegué al estadio y vi que los vendedores ambulantes vendían la camiseta violeta de Belgrano, dije que algo grande había pasado”, relata Julieta Cementerio, fiel seguidora de las ‘Piratas’. Incluso acompaña hasta los partidos de visitante. “Primero empecé para apoyar y ahora estoy enamorada del femenino de Belgrano. Ver a gente de todas las edades en la cancha yendo a ver el equipo, que inclusive hasta saben el nombre de todas las jugadoras, me emociona”, dice ‘Juli’.
En la misma sintonía, Sofia Carlopio, fanática de Talleres, relata: “Las lógicas del fútbol femenino no tienen que ver con las que conocemos del masculino, porque hay tantas adversidades y derechos conquistados que todo se festeja como un campeonato. Las hinchas que vamos a ver al femenino muchas veces conocemos y sentimos mucho a las jugadoras. El fútbol femenino es familia y, partido a partido, se va sumando más gente y está buenísimo, porque todo el trabajo de visibilizar está teniendo su fruto”.
MATADORAS. Talleres está participando de la Primera de la liga local y son protagonistas dentro y fuera de la cancha.
- ALENTANDO DESDE HACE 10 AÑOS
- Por: Adriana Rey (*)
- Soy hincha de Belgrano; algunos dicen que soy la jefa de la barra de Belgrano femenino, pero debe ser por mi antigüedad. Hace más de 10 años que sigo el fútbol femenino. En general sigo todos los deportes, pero el femenino tiene la particularidad de que mi hija juega y le seguí durante toda su trayectoria. Siempre nos acordamos con los papás que al principio éramos dos o tres en las canchas y ahora, en este último tiempo, es emocionante lo que pasa en cada partido, por la cantidad de gente que va a la cancha. Ver mujeres, hombres, niñas, niños, familias enteras, me produce una emoción muy grande. Antes, el femenino estaba poco visibilizado y ahora, con todo este proceso que encabezaron algunos equipos del interior, la exposición es mayor y ahora somos un montón alentando. A mí me encanta ir a los partidos, voy a la Liga y a AFA y ver la tribuna llena para alentar es algo que no estaba en mis pensamientos cuando empecé este camino. Pensé que nunca iba a pasar, pero cuando Belgrano jugó con Vélez hace unas fechas fue fantástico. Es hermoso y cada día habrá más público. Es una fiesta la hinchada. Es un proceso largo, pero cada día se va a renovar el público y seremos más, de todas las edades y géneros.
- * Hincha de Belgrano y mamá de la futbolista Victoria Arrieto.