Con el dólar sin control y una negociación con el Fondo Monetario Internacional (FMI) que no muestra signos concretos de avances, la semana que pasó fue una de las más intensas desde lo político-económico en los últimos meses. En ese contexto, PERFIL CÓRDOBA dialogó con Diana Mondino, economista y directora del CEMA, quien se refirió a la posibilidad de un acuerdo con el FMI, a la chance de que Argentina caiga en default y a un posible escenario de híper-estanflación.
-¿Cree aún posible un acuerdo con el FMI? La brecha entre lo que ellos piden y el gobierno ofrece parece cada vez más grande. ¿Hay punto intermedio?
-Siempre puede haber un acuerdo, pero recordemos que esto no es una negociación en un bazar. Hay criterios técnicos que respetar. Las reglas del FMI son uniformes y conocidas y establecidas hace algunos años. Dentro de esas reglas, se puede conversar muchísimo.
-¿Cree que el FMI podría sentirse presionado por una Argentina que advierte sobre el virtual desprestigio en el que caerían si no nos ayudan? ¿Podrían cambiar su posición a nuestro favor si Argentina se inclina por Rusia o China?
-¿Por qué sería un desprestigio para el Fondo? Si Argentina tiene déficit persistente y no puede pagar ni siquiera intereses no es por un tema del Fondo. Los tenía antes y los sigue teniendo. Entre paréntesis, los sobrecargos de los cuales se queja Argentina -que son uniformes para todos los países- son también nuestra responsabilidad: haciendo algunos pagos que reduzcan ciertas relaciones técnicas, se reducen o desaparecen. Y en todo caso no sería Argentina la que se inclina por Rusia o China sino ellos los que estuvieran dispuestos a prestarnos. Y si lo hicieran y fuera más barato y sin condiciones, bienvenido sea. Al fin y al cabo al FMI le pedimos para pagar a otros acreedores que eran más caros.
-¿Qué escenario concreto visualiza si terminamos en default en marzo?
-No creo que volviera el financiamiento voluntario. Han sido muchas, demasiadas declaraciones oficiales criticando el pago. Si no se le paga al acreedor actual, sea el FMI o cualquier otro, no habría otros préstamos. No debemos olvidar la financiación para empresas. Con default se complica mucho más ese tema. Se dice que sería mejor pagar después de crecer, pero justamente… cómo hacemos para crecer si las empresas no tienen rentabilidad, las familias no tienen posibilidad de ahorrar y nadie tiene financiación. Recordemos que no estamos pagando todavía y tenemos notable déficit.
-Algunos expertos advierten que comenzaría un ciclo de híper-estanflación. ¿Cree que ese escenario es posible?
-Lamentablemente es posible pero creo que el Gobierno lo sabe perfectamente y no incurrirá en default. Si lo hace, será necesario un gigantesco cambio en la economía para que no colapse por falta de actividad.
-¿Qué significa para las empresas, y el ciudadano común, un estado virtual de híper estanflación o como advirtió el World Economic Forum (WEF), un “colapso del Estado?
-El Estado no está prestando los servicios que debiera. Todos sabemos lo que pasa con la seguridad, educación, salud, etc. Una cosa es gastar mucho y otra gastar bien. El concepto de eficiencia en el Estado parece haber desaparecido. Más que colapso, que implicaría desaparición, es un Estado fallido: cuesta dinero y no brinda los servicios para los cuales existe.
-¿Cómo encontrará a Córdoba esta situación?
-En Córdoba la situación es mucho mejor en cuanto a prestación de servicios pero se observa una avidez por recursos para los que no encuentro justificación. Se nota un esfuerzo de modernización en cuanto a recaudación, me gustaría creer que se hace el mismo esfuerzo para modernizar los servicios.
-¿Qué caja le queda a la Argentina para funcionar de marzo en adelante? ¿Sólo el campo?
-El campo está exhausto, sin contar los efectos de la sequía. Es grave creer que siempre se le puede sacar al que trabaja y no dar nada a cambio. Pero peor todavía es todo lo que no podemos crecer por apalear al que trabaja. Siempre quedan cajas, y tocarlas es un daño cada vez más profundo porque serán muy difíciles de recuperar o peor: se crean problemas adicionales. Por haber destruido los fondos de pensión (FJP) y las moratorias continuas, hoy tenemos un problema mucho más grande.
-Probablemente nos enfrentamos a una crisis de tipo político-institucional con impacto económico, más que solo económica. ¿Lo ve así? Si así es: ¿qué espera que hagan las fuerzas de la oposición o qué entiende deberían hacer?
-Dejemos de lado la economía. Cada vez hay menos diques de contención de los problemas sociales. Mucho más importante aún que la economía es que deberíamos fortalecer la Justicia. Ninguna sociedad en el mundo puede avanzar si no hay adecuados pesos y contrapesos (checks and balances). Aquí ni siquiera se habla del tema, pero todos debiéramos focalizarnos en eso.