El fiscal de Instrucción del Distrito 1 Turno IV, Rubén Caro, confirmó esta mañana que la causa del incendio fatal en un edificio de Nueva Córdoba en el que murieron dos jóvenes fue el sobrecalentamiento de la batería de litio de una notebook.
“Muchas veces creemos que solamente ocurre cuando están sobrecargadas, cuando tienen algún problema, pero realmente hemos visto que estas baterías de litio son bastante traicioneras y pueden producir daños terribles”, explicó el funcionario judicial en conferencia de prensa.
Además precisó que de acuerdo a las conclusiones de Bomberos el siniestro se originó en la zona del comedor, “más precisamente en el sector próximo al vértice noroeste”.
“La fuente térmica que dio inicio pudo estar representada por un autocalentamiento en la batería de la computadora notebook”, enfatizó en declaraciones difundidas por Mitre Córdoba.
Caro señaló que por el testimonio de Pablo Apaza, el único sobreviviente del incendio, se pudo “determinar fehacientemente todos los muebles que había en el departamento, los apuntes, un montón de papeles y otros elementos de fácil combustión como así también donde estaban localizadas las computadoras y otros teléfonos celulares que pertenecían a los chicos”.
El trágico episodio ocurrió el pasado 28 de marzo en el departamento “A” del piso 12 de un inmueble ubicado en avenida Hipólito Yrigoyen al 400, donde residían tres estudiantes oriundos de la provincia de Jujuy.
En el lugar falleció Tiziano Tejerina, de 18 años, quien se había instalado en la capital cordobesa para cursar la carrera de Medicina en la Universidad Nacional de Córdoba (UNC).
La otra víctima fatal, Sebastián Liquín (19), sufrió graves heridas tras caer del piso 12 a un patio interno cuando intentaba huir de las llamas.
Liquín fue trasladado hasta el Hospital de Urgencias, donde luego murió por las graves heridas sufridas.
Pablo Apaza, el único sobreviviente de la tragedia, logró descender hacia una ventana del piso de abajo y fue rescatado por personal de bomberos.
