En medio de la pandemia, y atravesando las últimas horas antes de entrar en la cuarta fase de la cuarentena en Córdoba, el radicalismo decidió continuar con las internas que desde que arrancó el año tienen enfrentados al sector que lidera el exintendente Ramón Mestre con el bloque que componen el concejal Rodrigo de Loredo, el legislador Orlando Arduh y el exparlamentario provincial, Javier Bee Sellares, entre otros.
El martes, el Comité Provincial que preside el exintendente le envió una carta al Congreso que encabeza De Loredo solicitando que suspenda el llamado a elecciones que debía realizarse hoy, que ponga como fecha de comicios internos el 22 de noviembre y que, en consecuencia, prorrogue el mandato de Mestre hasta el 10 de diciembre próximo.
La mesa del Congreso se reunió el jueves y allí la moción que presentó De Loredo consistió en realizar una ronda de consultas entre las autoridades de los partidos, instancia que el mestrismo considera se realizó hace diez días con la reunión de todos los núcleos, autoridades departamentales y legisladores donde algunos dijeron que “no había que sonrojarse por una prórroga más dentro del partido” dando ejemplos de varios casos.
La votación del Congreso, que tuvo la polémica porque el mestrismo quería que votaran los suplentes, terminó 6 a 4 con el voto afirmativo de dos congresales que responden a De Loredo, uno del angelocismo y tres que abrevian en el tándem Arduh-Bee Sellares.
La respuesta llegó casi de inmediato cuando el Comité Central convocó para una reunión el viernes pasado a las 15. Allí, cuentan que Mestre abrió el debate vía Zoom, hizo un análisis de otras cuestiones que están ocurriendo en el partido y se retiró.
La decisión fue convocar a elecciones internas en toda la provincia el 9 de agosto y arrancar con el cronograma electoral el 11 de junio próximo. Pero, además, el comité central pidió que se enmiende la resolución de la mesa ejecutiva del congreso en la que se hizo caso omiso a suspender la fecha de convocatoria a internas y una segunda resolución, tiene que ver con solicitar al congreso para que decida la prolongación de los mandatos partidarios. Considerando que en la reunión de hace diez días autoridades partidarias, de núcleos y departamentos, coincidieron en esto.
De Loredo en el grupo de Whatsapp del congreso se comprometió a una nueva convocatoria del pleno en la semana y lanzó, con ironía, si votaban los suplentes.
Disparos cruzados. Tanto la decisión de uno como del otro desataron una tensión en el partido que comenzó el viernes por la noche y se extendió hasta ayer por la mañana. E involucró a autoridades con base en la capital, pero también a referentes del partido en el interior que hicieron saber su malestar tanto con Mestre como con De Loredo.
Desde el eje que integra el concejal capitalino junto a Arduh y Bee Sellares acusaron a Mestre de convocar a elecciones en medio de la pandemia. Y otros dirigentes se sumaron con críticas al señalar a PERFIL CORDOBA que “la desesperación del exintendente pasa por tener el control de los comicios”. “Hay temor que el congreso tome la facultad legal de llevar adelante el proceso electoral. La de Mestre es una convocatoria caprichosa”, agregan.
En contrapartida, este diario contactó brevemente ayer al exintendente que señaló: “me parece descabellado estar hablando de internas la situación que estamos viviendo” y ratificó que no formó parte de la discusión del viernes por la tarde.
El entorno del intendente también calificó de irresponsable la actitud de De Loredo al anticiparse con la decisión del congreso sin aguardar que se venzan los 90 días previos al cumplimiento del mandato que comienzan a regir desde hoy.
La tensión entre los dos sectores es palpable, el surgimiento de los “moderados” que empiezan a tomar distancia de ambos, también.
