Nadie por aquí, nadie por allá. La parte alta de la Platea Ardiles estaba vacía en sus dos extremos y sólo albergaba a “los del medio”: directivos, allegados y periodistas. Abajo el panorama no cambiaba demasiado, y en la Popular Willington no más de 800 hinchas le hacían el aguante a Talleres en el amistoso frente a River. La postal del domingo pasado en el Estadio Kempes le hizo abrir los ojos a más de uno. ¿Tanto podía haber dolido la reciente eliminación de Copa Argentina a manos de Rosario Central? ¿Representaba una afrenta que el DT Juan Pablo Vojvoda armara el equipo con un mix de recambios y juveniles? ¿O más bien era una muestra gratis de la caída del consumo y de la crisis económica que atraviesa el país?
“Es un tema que está fuera de nuestro análisis, ya que ese partido fue organizado por Torneos y Competencias y nosotros no tuvimos ninguna injerencia. No fijamos el valor de los tickets”, sostiene Miguel Cavatorta, el responsable de Comunicación y Vinculación Institucional de la “T”. Ya enfocado en la Superliga, competencia en la que también se advierte una merma en la asistencia a los encuentros de parte de los simpatizantes albiazules, el vocero admite una disminución en la venta de abonos: “En la temporada anterior cerramos con 32 mil y ahora tenemos 23 mil”.
Las cifras dan cuenta de una caída del 30 por ciento respecto al campeonato pasado. “Hicimos un relevamiento y uno de cada 10 socios nos dijeron que no renovaron sus ubicaciones por motivos económicos”, precisa Cavatorta. En alusión al pago de cuotas sociales y abonos (el “impuesto a la pasión” cotiza a un promedio de $5.880 anuales en el caso de los “tallarines”) reconoce que “hubo mucha morosidad en los tres meses sin fútbol”.
“En Talleres prácticamente no hay compromisos en dólares y los contratos que están firmados en esa moneda tienen un tope, o sea que el impacto no ha sido significativo”, sostiene el portavoz de “La Casa Albiazul” al hablar de la corrida cambiaria. “En este momento el club no tiene deuda de ningún tipo”, enfatiza.
De todos modos, en barrio Jardín tienen en claro que habrá que pasar el invierno, la primavera y buena parte del verano, hasta que llegue febrero y empiece la Copa Libertadores. El torneo continental ya le tiene asegurado a la “T” un caché de 400 mil dólares por jugar dos partidos en la Fase 2 Preliminar (la escala subirá si va superando etapas), y la expectativa que genera esta nueva experiencia internacional podría hacerle perforar el techo de 43 mil abonados de la temporada 2016/2017.
Con suerte y pesificado
Por el lado de Belgrano, el vicepresidente 1º Sergio Villella pinta el panorama de estos tiempos complicados: “En nuestro caso tuvimos un golpe de suerte, porque arreglamos los contratos con los sponsors en mayo pasado y entonces pudimos cerrar el presupuesto antes de que se armara el lío grande”.
A diferencia de Talleres, el Pirata ya completó la capacidad disponible de su estadio para el primer semestre de la temporada 2018/2019. “Vender los abonos hasta diciembre sirvió para que los precios no subieran tanto. Y resulta mejor para el club, ya que si lo hacés anual cobrás todo el dinero de golpe pero corrés el riesgo de quedar desfasado a los siete u ocho meses”, explica el dirigente. Los 30 mil abonados de la “B” pagan, en promedio, $2.450 por semestre.
Villella aclara que Belgrano “está absolutamente pesificado”, descarta que haya sido inoportuno establecer el “Día del Club” en el encuentro de ayer ante Newell´s (“es algo que ya está fijado de antemano”), y pone el foco en dos asuntos puntuales. “Ahora hay que ver cómo funciona la venta del remanente de entradas, que son 1.000 tickets por partido. Y también está el aumento de los sueldos de los casi 250 empleados del club, lo que quizá nos lleve a tratar de ajustar ingresos en igual proporción”, señala.
Al analizar el contexto económico, Villella destaca la importancia del rubro “exportaciones”: “Racing nos pagó U$S 1,5 millones por la mitad del pase de Renzo Saravia, tenemos pendiente el cobro de los derechos formativos de Emiliano Rigoni (por la transferencia del Zenit de Rusia al Atalanta de Italia) y también la opción de compra que Unión Española de Chile tiene por Tobías Figueroa (U$S 500 mil)”.
“El mercado de pases está dolarizado y eso permite hacer diferencia”, afirma el directivo. Y añade: “En nuestro caso, tenemos una nueva fuente de financiamiento que es Tienda República de Alberdi, y que esperamos deje un ingreso anual de 12 millones de pesos ‘limpios’. Y está la chance de que el nuevo torneo (Copa de la Superliga, que se jugará del 14 de abril al 26 de mayo) acerque algún dinero extra”.
La Liga se devalúa
El fervor del Centenario le permitió a Instituto remontar los números en materia de socios que están al día –de 1.500 a 5.010 en el último mes y medio-, aunque las cifras todavía no logran frenar lo que es un reclamo recurrente de su dirigencia en los últimos tiempos. Para colmo, en una temporada donde “La Gloria” tiene casi todas las fichas puestas en el fútbol profesional, el arranque del equipo en la B Nacional no ha sido el esperado.
Mientras tanto, en el básquetbol –desde hace tiempo, “un mundo aparte” en el Albirrojo- se ilusionan con que la participación en la Liga Sudamericana sume patrocinios, más allá de la crisis y de la baja del goleador estadounidense Dwayne Davis, quien acaba de firmar para Aguada de Uruguay tras una breve estadía en Vaqueros de Puerto Rico.
La suba del dólar complica, y mucho, en una Liga Nacional que siempre apostó a la contratación de jugadores extranjeros como un salto de calidad. No es la excepción la Asociación Deportiva Atenas, que ya no tendrá a los estadounidenses Donald Sims y Jerome Meyinsse, que jugarán el próximo certamen en el tricampeón San Lorenzo.
En contrapartida, “El Griego” había anunciado la contratación del escolta norteamericano Larry O`Bannon y tenía acordada la llegada del base venezolano Heissler Guillent, pero ambas operaciones se frustraron por el vertiginoso avance de la divisa norteamericana en las pizarras de bancos y casas de cambio.
Las becas no se tocan
En la Agencia Córdoba Deportes ya saben que tendrán que sumarse al recorte de los gastos de la Provincia, que podría reducir hasta un 30 por ciento el monto destinado a cada repartición. No obstante, en el organismo que preside Medardo Ligorria se piensa en readecuar los gastos sin afectar las ayudas económicas, que hoy tienen 160 beneficiarios entre deportistas y entrenadores.
“La idea es mantenerlas”, asegura Mariano Reutemann, vocal del directorio del ente mixto y encargado del vínculo con las federaciones. En la distribución de recursos de 2018, la Agencia Córdoba Deportes recibió $304.743.000, lo que representa un 0,2 por ciento del gasto anual de la gestión Schiaretti.
ATP 250, el torneo de los U$S 4 millones
La confirmación del ATP 250 de Córdoba, certamen que en 2019 se sumará al circuito masculino de tenis, llegó un par de semanas atrás y se anticipó por unos días a la estampida del dólar. El evento, cuya primera edición se hará del 4 al 10 de febrero, se anuncia con premios por 550 mil dólares y se estima que organizarlo costará 4 millones de la moneda estadounidense.
“Van para adelante sí o sí”, afirmó Juan Luis Pérez, titular de la Federación Cordobesa de Tenis, respecto a “Torneos”, la empresa dueña de los derechos. “Firmaron un contrato por 10 años, con opción a una década más. Esto en algún momento tiene que cambiar y ellos tiene espalda para perder dos o tres años”, añadió el directivo.
La definición de la sede se dilató por la paridad en la calificación de las dos propuestas originales –Córdoba Lawn y Jockey Club- y también por la aparición a último momento de un “tercero en discordia”: el Estadio Kempes.