Perfil
CóRDOBA
LA DISPUTA EN UNIÓN POR CÓRDOBA

La interna por la Capital estiró las definiciones en el peronismo

El legislador Daniel Passerini aún no declinó su candidatura y siguen las conversaciones con Llaryora. Para la Provincia, todos encolumnados detrás de Schiaretti.

_20190210_passerini_llaryora
DESAFÍO. Passerini sigue con la postura de pelear la Capital y enfrentar a Llaryora. | Cedoc Perfil

Las definiciones en el terreno de la interna peronista se extendieron hasta el 10 de marzo. Situación que desde el miércoles, y pese al vencimiento de plazos para la presentación de listas el viernes pasado, venía siendo barajada por algunos protagonistas de la disputa en la capital cordobesa. 

La discusión está centrada en la capital cordobesa, donde el legislador Daniel Passerini aún no declinó su postura y se plantó a Martín Llaryora, el apuntado por la mayoría de los sectores del PJ para la carrera por el Palacio 6 de Julio. Esto, sumado a algunas discusiones en el interior, derivó en la extensión de los plazos. 

Sin embargo, hay sectores que agregan además del acuerdo político entre el parlamentario provincial y el diputado nacional, otros dos factores para la prórroga: aún Cambiemos no mostró las cartas y la gestión provincial permite entrar en sintonía de campaña sin estarlo. Esto es, las recorridas y los cortes de cintas van a continuar sin las confirmaciones por los cargos.

La pelea Capital. El plan del llaryorismo venía saliendo a la perfección. Habían desistido de sus aspiraciones Gabriel Bermúdez y Miguel Siciliano, el propio Llaryora se animó en la semana a hablar de que “sería un honor” ser intendente de la ciudad en un acto en Villa El Libertador y sólo faltaba torcer la intención de Passerini. 

Sin embargo, y pese a las maniobras de algunos en el entorno del exintendente de San Francisco, la respuesta desde el entorno del legislador fue casi inmediata. “No se baja. Él tiene un acuerdo con Llaryora y van a seguir hablando la semana que viene. Pero sigue en carrera”, dijeron a PERFIL CORDOBA en la tarde del viernes y agregaron que, por ahora, “son dos jinetes para un solo caballo”. 

Además, reconocen que “el que lo tiene que llamar para que se baje todavía no lo llamó”, en clara alusión a los principales despachos del Panal. 

Cerca de Passerini también descartan la negociación por la banca en el Congreso. En las Legislativas 2017 el exministro de Desarrollo Social de José Manuel de la Sota fue el cuarto en la boleta que terminó con tres integrantes de UPC en la Cámara baja: Llaryora, Alejandra Vigo y Paulo Cassinerio. Si el integrante de la Cámara baja gana la intendencia, se liberaría la banca y llegaría Passerini al Congreso. 

Sin embargo, en el PJ provincial sostienen que el pedido desde el entorno del legislador provincial sería directamente por la renuncia a la banca de Llaryora, al margen de lo que pueda ocurrir en las urnas el 12 de mayo. Jugada arriesgada para el hombre de San Francisco. 

El resto del delasotismo. Mientras esta pelea se dirime, el diálogo que encara Natalia de la Sota con el schiarettismo se mantiene. Incluso, algunos optimistas se encargan de hacer correr la versión de un posible acuerdo para que la hija del exgobernador encabece la lista de legisladores provinciales, aunque ella mantenga el deseo de ser compañera de fórmula de Schiaretti. 

Pero no es la única relacionada a De la Sota que negocia. La diputada Adriana Nazario también empezó a tejer por no menos de cinco legisladores en la boleta provincial y respaldo a referentes de La Militante para que sean candidatos a intendente en el sur provincial. 

Los gremios. Los sindicatos son otro factor de poder en el que Schiaretti quiere concentrar el apoyo a su reelección. De la paleta de las centrales sindicales, la CGT Regional que encabeza José Pihen, dicen que está adentro. 

Pero el poder de la representación entre los gremios y la Provincia no será todo para el legislador. Siguen el diálogo con Pablo Chacón y Omar Dragún, sobre todo desde Alejandra Vigo; mientras que las 62 Organizaciones, encabezadas por Ricardo Moreno y Sergio Fittipaldi también continuarán su línea directa con los despachos principales de Casa de Gobierno en busca de un acuerdo. 

En tanto, la CGT Rodríguez Peña encabezada por Mauricio Saillén es actualmente la más distanciada en los hechos del schiarettismo. El líder del Surrbac podría impulsar un kirchnerista en la provincia de la misma manera que lo hizo en 2017 para las Legislativas.