Perfil
CóRDOBA
ANÁLISIS

Los 100 dias de Javier Milei: la gente lo está apoyando “pero ojo, no tienen la camiseta puesta”

Mora Jozami es analista de opinión pública y describe cómo es la luna de miel con el nuevo gobierno. Pone el foco en el enfrentamiento direccionado con “opositores”, la falta de un contrapeso al presidente y el aprovechamiento de la confianza, muchas veces, ciega de sus votantes.

Caricatura de Javier Milei
Los primero 100 días de Javier Milei | Luis Ordoñez @#luisordonezoficial

La analista política y una de las directoras de Casa 3 interrumpe su rutina para encontrar algunas reflexiones sobre los primeros cien días en la presidencia de Javier Milei.

La primera afirmación es que ganó las elecciones prometiendo algo diferente, opuesto a las políticas de los últimos gobiernos kirchneristas. Esto lo llevó a consolidar una nueva grieta entre los ciudadanos, los que confían ciegamente en el libertario y los que lo critican.

“Como la economía y sobre todo la inflación, son el principal problema para los argentinos, lo están apoyando porque creen que Milei está haciendo lo que hay que hacer. Pero ojo, no tienen la camiseta puesta. Si no hay resultados no creo que cambien de equipo, pero dejan de apoyar”, disparó en modo debate Mora Jozami.

Desde hace tres meses se menciona muy poco a dos personas que tuvieron mucho protagonismo en las últimas décadas en la política nacional: Cristina Fernández y Mauricio Macri. Ambos quedaron bajo la sombra del “outsider” y queda vacante el lugar de opositor. No aparece en escena ningún gobernador o dirigente que logre poner equilibrar la balanza.

Tarditti: “Me parece una provocación dejarle a la Argentina una Corte integrada por 5 varones por 20 años”

El discurso áspero y direccionado en redes sociales, principalmente en X sienta la agenda de la discusión pública y política. En ese sentido, el “desafío del presidente es mantener la afinidad” de su votante, pero principalmente del electorado del extinto “Juntos por el Cambio”, especialmente el vinculado al Pro.

Mora Jozami, analista política Casa tres

P: Pasaron 100 días del gobierno de Milei ¿Hay una nueva grieta entre los pro y los Anti Milei?

MJ: No es una novedad para la historia política argentina que haya grietas y polos opuestos que socialmente reciben apoyos y críticas. Desde la campaña electoral por la presidencia de la nación estaba claro que Milei venía a proponer algo diferente, totalmente opuesto a las políticas e ideologías de los últimos gobiernos kirchneristas. Como en su momento existió una sociedad pro o anti Cristina Kirchner, y pro o anti Mauricio Macri, hoy podemos decir que tenemos una división pro o anti Milei. Recordemos que las elecciones se definieron por ballotage en la que Massa recibió el voto de arriba del 44% de la población. Esa parte de la ciudadanía probablemente siga manteniéndose en contra de cualquier política de Milei. 

Milei supo manejar ese clivaje despersonalizándolo y generando una grieta pro o anti cambio. De esa manera permite que estén “de su lado” muchos que aún sin acodar con sus formas o algunas de sus ideas consideran correcto el camino que el emprende.

En este sentido el desafío que tiene Milei, su partido y el gobierno nacional, es mantener la afinidad y el apoyo de gran parte del votante del PRO que fue quien le permitió pasar de un treinta y pico a un cincuenta y pico en el ballotage. Si esto cambia, es probable que la balanza se vuelva negativa. Por otra parte, también existe una porción más chica de la población, pero que es pendular, y que no se casa con nadie, que hoy puede estar de acuerdo con la dirección en materia económica del presidente, pero en el resto de las políticas y modos está bastante en desacuerdo. Como la economía y sobre todo la inflación, son el principal problema para los argentinos, lo están apoyando porque creen que Milei está haciendo lo que hay que hacer. Pero ojo, no tienen la camiseta puesta. Si no hay resultados no creo que cambien de equipo, pero dejan de apoyar.

El cordobés Piva, uno de los funcionarios despedidos por Milei que cobraban 11 millones de pesos por promover el turismo en Miami

P: Perdieron protagonismo líderes como Cristina y Macri. ¿Eso lo capitaliza Milei?

MJ: Estoy de acuerdo con esa afirmación en parte. Es claro que Milei es quien protagoniza la agenda y monopoliza la conversación ya sea por el contenido de lo que emite como por el canal o las formas que decide usar. Es el presidente y decide mantener una comunicación directa, y muchas veces confrontativa, que lo hacen estar en primera plana de forma ininterrumpida.

Lo que está pasando hoy, es que está vacante el reconocimiento de quien es el líder de la oposición. La gente no lo tiene claro, y la política tampoco. Milei no se opone a alguien especifico sino a ideas, conceptos y a personas específicas en casos particulares como hizo con Morales en el discurso del 1 de marzo.

Es cierto que Cristina bajó su perfil, se corrió de la escena diaria, probablemente porque al interior de su espacio estén evaluando si finalmente Axel Kicillof es el heredero, o cómo y con quien posicionarse frente a este nuevo contexto. Pero en contraposición Mauricio retoma protagonismo. Reagrupa al PRO, decidió liderarlo ahora como presidente del partido, y empezar una nueva etapa. Un espacio que, en las elecciones del año pasado, sufrió internas que al final del camino terminaron perjudicando las posibilidades de victoria electoral y que hoy necesita enfocarse nuevamente. Entender cuál es la dirección. Y en eso estará sobre la mesa la decisión de acompañar o no, y cuanto acompañar al gobierno nacional. No olvidemos que hasta no hace mucho circuló la posibilidad de un cogobierno entre la LLA y el PRO, en el que Mauricio hubiese sido un principal tomador de decisión en la conformación de ese nuevo gabinete. No sucedió, pero lo que te quiero decir con esto, es que Mauricio sigue en la cancha, sostiene protagonismo y construye una nueva etapa de liderazgo en la escena nacional reanimando a un partido que supo ser el primero en levantar muchas de las banderas que hoy se identifican con la LLA.  

Gustavo González: "Victoria Villarruel tiene vuelo propio"

P: ¿Hay gobernadores del PJ que puedan aspirar a generar un contrapeso con Milei? Principalmente Martin Llaryora ¿puede aspirar a entrar en escena?

MJ: Es posible. Pero todo depende de cómo prosperen las alianzas entre los gobernadores, en bloques que efectivamente generen contrapeso. No es lo mismo la negociación entre una provincia con el gobierno nacional de forma individual que un bloque de gobiernos provinciales que defiendan intereses regionales. En este punto pienso que, si logran unidad y alinean una posición por ejes, el gobierno nacional tendrá que escuchar más y ceder.

En cuanto al color político de los gobernadores, creo que, en esta posibilidad de alianzas regionales, no es algo tan relevante, siempre y cuando haya intereses en común. Un ejemplo que recientemente es prueba de esto es el apoyo que tuvo Nacho Torres, el Gobernador de Chubut, en su conflicto con Milei, en donde sin importar el partido político, la mayor parte de los gobernadores lo apoyaron frente al ejecutivo nacional.

Por ahora, el contrapeso a Milei lo visualizo más en bloques regionales de gobernadores, y no como figuras particulares que puedan destacarse, más allá de que Martín Llaryora represente a una de las provincias más productivas y pobladas del país. Como expresé antes, el líder opositor a este gobierno, está vacante y en años pares las posibilidades de alianzas siempre se inflan pero a la hora de definir candidaturas las diferencias afloran.

P: ¿La vieja política entiende la dinámica de las redes y cómo comunicarse con el gobierno central en esta guerra discursiva por X?

MJ: La dinámica que impone el gobierno nacional, en particular Milei, en las redes y principalmente en X, son efectivas y direccionadas a su votante. Se puede estar de acuerdo o no con las formas, pero generan conversación de forma continua y alimentan a una porción muy importante de su electorado que encuentra en los dichos del presidente argumentos para defender la gestión. Existe una sobreestimulación de información, la comunicación es menos formal y más directa, y eso es posible gracias a la aceptación de la sociedad en este contexto de hartazgo. Las personas, quieren que los líderes y formadores de opinión sean claros, transparentes y directos, que vayan al grano.

Desde mi visión, ser claros y directos es una buena forma de comunicar, pero no se puede perder el respeto, aumentar la grieta social e intervenir públicamente en las redes siempre con el escudo y la espada. Quienes ocupan roles de representación masiva y pública tienen que ser conscientes del impacto social que sus declaraciones pueden provocar. Si la vieja política entiende o no la nueva dinámica en las redes, sobre todo en X, es difícil tener un diagnóstico claro, porque el problema central de la vieja política pasa por un lado más complejo. La discusión de la vieja política pasa en cómo adaptarse a estos nuevos tiempos, de qué forma reconfigurar su ADN, y cómo revalorizar el concepto de la buena política, aquella con la que en algún momento se la identificó como la garante de las soluciones, el orden y la paz social.

P: ¿Hasta cuánto resiste la gente el párate económico y el aumento de precios?

MJ: Esa es la respuesta del millón. Hasta cuando la gente aguanta el reacomodamiento que significa pasar a una economía administrada por las reglas del mercado. Según el INDEC existe una baja de la inflación en los últimos meses, la última publicación fue la de febrero con un 13% de inflación. Por lo tanto, la lógica indicaría que debería cesar poco a poco la suba de precios en alimentos y servicios. La apertura comercial a productos internacionales, que compitan en el mercado argentino, va en esa misma línea. Esta decisión puede traer dos consecuencias: competencia y estabilización en los precios, pero también el cierre de empresas nacionales que no puedan competir. Y por ende gente que se quede sin trabajo.

Encuesta: los datos económicos que preocupan a Javier Milei aunque la culpa es toda de Alberto Fernández, Macri y los sindicatos

Ahora bien, la gente ¿percibe esta baja en la inflación? O al contrario, ve cada vez más inaccesibles productos y servicios que antes estaban en su economía doméstica. El punto para detenerse acá es que, si bien la sociedad abandonó o aplicó una reducción de sus consumos, el 70% según encuestas, es consciente de que como estábamos no podíamos seguir. Era insostenible. Parecería que en parte Milei hizo entrar en razón a la gente y aceptó que había que cambiar. Fue un candidato que ganó las elecciones diciendo que se tenía que hacer un ajuste y que el futuro cercano iba a ser peor que la situación del 2023.

Mientras que la gente siga creyendo que Milei y su gobierno son capaces de bajar la inflación, y solucionar los problemas económicos de Argentina, esa expectativa positiva va a seguir existiendo. Si el dólar sigue estable, los precios se estabilizan, la inflación baja mes a mes y los aumentos de sueldos empiezan a igualarla, la gente tendrá más previsibilidad y por ende continuará la expectativa positiva. Mientras la gente siga creyendo que en el futuro va a estar mejor va a aguantar.