Lynn, la 'masajista' inglesa

Es un lugar común pensar, y decir, que los ingleses son mesurados, circunspectos, sobrios, hasta aburridos. 

Pero hay demasiadas muestras que señalan lo contrario, a tal punto que existen excelentes cómicos británicos y el humor que cultivan es de los mejores. 

A uno de esos ejemplos lo conocí en un viaje de RIU Hotels & Resorts a Jamaica. Compartí ese press trip con Lynn, una inglesa cincuentona, rubia, bajita y regordeta que nos hizo divertir todo el tiempo. 

Además de convertirse en la líder del equipo de kayak, de participar en todas las excursiones, de intervenir en cada una de las actividades de aventura, demostró tener un buen humor a toda prueba. 

También formaba parte del grupo un colega y amigo colombiano, Juan Manuel Ramírez Montero, quien en un paseo en catamarán a bordo del cual nos hacían masajes, cuando le tocó el turno a Lynn reemplazó a la masajista y le hizo él los masajes. 

Cuando Lynn se enteró de la trampa, esperó que le tocara el turno a Juan Manuel y allá fue ella a suplantar a la masajista. 

No solo se tomó venganza de la broma, sino que lo hizo quejar al amigo colombiano por la “energía” de los masajes. 

Si había que bailar, bailaba; si era momento de tomar algo en el bar, pedía su Daikiri; a la hora de descansar, era una de las últimas en retirarse, y para el desayuno, una de las primeras. 

Cuando fui a buscar las fotos de ese viaje descubrí que su rubicundo rostro, con una eterna sonrisa, estaba en casi todas. 

Si viajás a Jamaica, no dejés de visitar la casamuseo de Bob Marley.

#vascoandariego