Los directivos de Renault y Nissan remarcaron en el acto de presentación de la nueva pick-up Nissan Frontier que esperan vender 70.000 unidades de los tres modelos (más la camioneta de Mercedes) que se prevén fabricar en la nueva línea. El hecho inédito de que se haya montado en Córdoba una línea para la producción de tres automotrices y el desembolso de US$ 600 millones tuvo varias aristas. Una de ellas es el convenio aggiornado que diseñó y logró aprobar en París la cúpula del Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (Smata).
En diálogo con PERFIL CORDOBA, Omar Dragún remarcó que ese convenio y el apoyo del Gobierno provincial fueron claves para traer una inversión que seguramente se iría a otro país. “Para nosotros esto es la culminación de un trabajo que empezó en 2014 cuando presentamos un Convenio Colectivo de Trabajo modificado y moderno. Lo llevamos a Francia, fue aprobado y después de pelear con fábricas de la alianza logramos que se haga acá, en conjunto con el Gobierno provincial, nacional y las empresas. Se firmó en abril de 2015 en París”, recordó.
Resignaciones. Según Dragún el convenio pactado fue la puerta para que ingresaran nuevos trabajadores a Nissan y a Renault, aunque reconoció que resignaron beneficios: “Se plantearon cambios en el sistema de productividad: en el inicio tuvimos turnos de cuatro horas con los nuevos trabajadores, fue un gran sacrificio de 500 trabajadores. Tuvimos turnos reducidos y debimos adaptarnos a nuevos sistemas de producción que no son los mismos de Nissan y Renault. Peleamos la llegada del Logan nuevo, del Sandero, del Sandero Stepway, porque el cierre de la producción de Kangoo nos perjudicaba”.
A otra plaza. En línea con lo comentado anteriormente, para Dragún sin el convenio que armaron, la inversión se hubiera ido a otra plaza: “Estaba vista la plaza de Brasil, que para ellos era absolutamente interesante, también Colombia que tiene importancia por la baja cantidad de impuestos y México donde pagan impuesto 0. Con la producción de México realmente les convenía muchísimo más que traer la inversión a la Argentina”, apuntó.
Crítica de UOM. Rubén Urbano, titular de la Unión Obrera Metalúrgica en Córdoba, no ve con buenos ojos los acuerdos en los que se resignan beneficios de los trabajadores en pos del puesto laboral: “Es una negociación bastante peligrosa, porque siempre quedan precedentes para adelante. Cuando las cosas están bien no pasa nada, pero cuando se complica ahí se nota la desmejora que han tenido”.
-¿Abren la puerta a una precarización aceptada?
-Así es. Y con gente nueva. De no tener trabajo, van a entrar a una fábrica pero con sueldos muy bajos.
