A dos meses de la elección para elegir intendente en la ciudad de Río Cuarto, se visualiza un escenario de tres tercios, con candidatos que protagonizarán una carrera muy pareja. Este miércoles se vencen los plazos para presentar alianzas y el 8 de mayo las listas de candidatos para los comicios que se realizarán el 23 de junio.
Los tres candidatos que se encuentran al frente de las encuestas que se conocen, son Adriana Nazario, exdiputada nacional; Gonzalo Parodi, de la UCR, y Guillermo de Rivas, dirigente justicialista y secretario de Gobierno de la Municipalidad de Río Cuarto. Según fuentes de los tres sectores, “todavía no hay nada definido” porque desde aquí al miércoles “puede pasar cualquier cosa”. En el peronismo se asegura que hay un intento para convencer a Nazario, tendiente a que resigne sus aspiraciones y baje su candidatura a intendente.
Una de las encuestas que circuló en las últimas semanas por el Centro Cívico muestra que Nazario tiene una intención de voto del 20 por ciento, Parodi llega al 15 por ciento y De Rivas alcanza el 13 por ciento. Otro sondeo indica que Nazario tiene 20 puntos contra 17 de De Rivas, quien viene creciendo semana a semana. Este trabajo lo margina de la pulseada al radical Parodi
Natalia de la Sota apoya la candidatura de De Rivas y entrelíneas se lee que desde hace tiempo no tiene relación con la empresaria y última pareja de su padre.
Desde el bunker de la candidata, argumentan que en los últimos días “Adriana no atiende llamados de nadie” y aclaran que aún no lanzó su candidatura de manera formal. Esto quiere decir que, tal vez, deje una puerta abierta a una negociación sobre la hora.
“Cuando se meta de lleno en la campaña subirá mucho en las encuestas y tendrá más aceptación”, relatan sus colaboradores y agregan: “Estará muy por arriba del 20 por ciento que marcan la mayoría de las encuestas en estos días”.
Nazario tiene resuelto presentarse a la competencia electoral con el sello del partido País, que en su momento manejó en Córdoba el dirigente del departamento San Martín Enrique Sella, aunque desde esa fuerza recuerdan que tienen postulante: Yvone Tessio.
El escenario es muy reñido, entre otras cosas, porque el peronismo aparece muy dividido y no logra la unidad que pregona el gobernador Martín Llaryora, quien cada vez que viaja a Río Cuarto encabeza actos acompañado por De Rivas.
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Voceros del peronismo reconocen que Llaryora comisionó al ministro de Gobierno, Manuel Calvo, para que buscara convencer a Nazario de que diera un paso al costado. El funcionario se comunicó con el nazarista Hugo Abraham pero la respuesta fue siempre la misma: no se baja.
Asoma el radicalismo. Sin embargo, en el marco de todo este proceso se aprecia una novedad: la irrupción de Parodi. Hace un tiempo, el radicalismo definió su candidato a través de una elección interna en la que compitieron Gabriel Abrile, que corría con el caballo del comisario según las especulaciones previas, y el propio Parodi, hombre de bajo perfil y desconocido para el gran público. Una especie de cenicienta riocuartense.
Pese a los pronósticos, Parodi dio la sorpresa y derrotó a Abrile, por lo que se convirtió en candidato a intendente y ahora nadie lo puede bajar de ese sitial. ¿Qué pasó? Fuentes de distintos sectores políticos de la ciudad del sur provincial, argumentan que el radical recibió “colaboración inesperada del peronismo, que brindó su aparato para que no ganara Abrile”.
Ahora, Parodi logró de buenas a primeras colocarse en la lista de posibles ganadores. Es más, hasta logró el apoyo del Frente Cívico que conduce Luis Juez. “Vamos a apoyar a Parodi, entre otras cosas, porque se portó muy bien con nosotros en la elección provincial ya que militó para Juez, mientras otros radicales en otras ciudades se hacían los distraídos y miraban para otro lado”, manifiesta ahora un conspicuo dirigente de ese sector. Obviamente, los dardos de la fuente están dirigidos a Rodrigo de Loredo, acusado por los juecistas de no haber movido un dedo en los comicios de gobernador y vice, celebrados el año pasado.
Otra incógnita es saber qué pasos dará Abrile, que ya fue tentado por algunos allegados al presidente Javier Milei para que lidere la boleta en La Libertad Avanza. Un sector de la UCR indica que “tendría que apoyar la lista del partido porque abandonar el barco ahora hipotecaría su futuro político”.
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En el radicalismo orgánico se la juegan a recibir el apoyo del derrotado en las internas. “Con Abrile adentro ganamos la elección y recuperamos Río Cuarto” para el centenario partido, afirman –casi a los gritos– veteranas voces de la UCR.
Otra es la visión del peronismo cordobesista, que apuesta a que el apoyo de Llaryora y de su antecesor, Juan Schiaretti, sirva para darle la victoria al justicialismo. “Con Martín jugando de lleno en los últimos días de campaña, ganamos seguro”, dice sin esconder su optimismo un vocero calificado del gobernador. Y recuerda la elección en la ciudad de Córdoba, donde el trabajo a destajo de la militancia llevó a la victoria al hoy intendente Daniel Passerini derrotando a De Loredo, quien ganaba con la fusta bajo el brazo, según las predicciones. Se viene otra elección atrapante.
