Sonriente y de permanente buen humor, Sofía “Jujuy” Jiménez se convirtió en poco tiempo en una de las gratas revelaciones de la temporada de Villa Carlos Paz, que comienza a transitar su recta final. En su debut como actriz, la joven es una de las integrantes de Locos por Luisa, la comedia más taquillera del país, obra en la que comparte escenario con artistas que exhiben una vasta trayectoria profesional como Diego Ramos, Pedro Alfonso, Tomás Fonzi, Iliana Calabró, Paula Cháves y Freddy Villarreal.
En diálogo con PERFIL CORDOBA, “Jujuy” calificó a la temporada como “una hermosa experiencia” y destacó la gran relación que se armó entre todos los integrantes de la exitosa propuesta de Dabope. “Está siendo un verano soñado, muy gratificante. Me llena de felicidad poder subirme al escenario todas las noches y escuchar las carcajadas de la gente. Luego le dedico un tiempo a conocerlos, saludarlos, sacarnos fotos. Fueron muchas sorpresas en muy poco tiempo. No me imaginaba lo que era hacer temporada en Carlos Paz, porque no había venido nunca y superó todas las expectativas”, destacó Jiménez. “Estoy agradecida con el elenco que me ha brindado un lugar hermoso en la obra, fueron muy generosos y me enseñaron un montón. Cada día aprendo algo nuevo con este grupo de artistas que son tan talentosos”, agregó.
—¿Alguno de tus compañeros tomó de manera particular ese rol de maestro?
—Sin dudas que Diego Ramos es quien tomó ese rol y siempre le digo que es mi director. Tenemos a Carlos Olivieri como el director de Locos por Luisa, pero Carlos se fue la primera semana. Diego, que además es director en varias obras en Buenos Aires, es quien más me aconseja. Freddy Villarreal también cumple ese papel porque con él estoy todo el tiempo en escena, entonces me marca cosas para sumarle a mi papel y de manera permanente me está enseñando nuevos tips. Me explica cómo potenciar un chiste, los espacios, los silencios, los momentos.
—¿Cómo fue descubrir esta nueva faceta, más vinculada a la actuación?
—La verdad es que me encanta. Descubrí en la actuación un mund o n u e vo q u e está buenísimo y se puede jugar un montón. El año pasado estudié actuación con Mónica Bruni, una actriz que ha trabajado con mucha gente en el medio y que tiene otra mirada. Me sirvieron esas clases y tengo ganas de seguir formándome. Además, es terapéutico hacer teatro porque desconectás de tu vida diaria, conectás con los personajes, sacás cosas de vos, también con la tristeza, la angustia y con sentimientos que uno tiene adentro.
—¿Ya se piensa en la gira con Locos por Luisa?
—Se armó un gran grupo y tenemos ganas de que empiece la gira, creemos que va a ser una especie de viaje de egresados.