Mañana se abrirá la audiencia del juicio oral y público a Brenda Barattini. La investigación, desde el primer minuto, deparó interés, controversias y sorpresas. El juicio no será la excepción, de acuerdo a lo que se pudo saber de antemano.
La joven arquitecta, quien permanece detenida en Bouwer, llega a esta instancia acusada por lesiones gravísimas de las que resultó víctima su amante. El hecho ocurrió la noche del 24 de noviembre de 2017, en su departamento de Chacabuco 580 en Nueva Córdoba. Según la elevación a juicio, Brenda colocó una tijera de podar debajo de la cama para utilizarla durante el encuentro sexual. Mientras él permanecía acostado le seccionó parte de un testículo y del pene, lo que le ocasionó una gran pérdida de sangre.
Luego, su aparato genital fue reconstruido en una delicada cirugía a la que le siguió una terapia de rehabilitación. La versión que aporten mañana los protagonistas sobre lo sucedido aquella noche será determinante para el rumbo que podría tomar el juicio.
Está previsto que declaren Brenda, su víctima y el novio de la joven en ese momento. Así lo confirmaron a PERFIL CORDOBA los abogados de ambos. A partir de ahí, la fiscal Laura Battistelli analizará si la calificación legal que se le debe atribuir a Barattini se agota en las lesiones gravísimas que provocó al hombre, o si debe endilgársele una acusación más grave: Homicidio en grado de tentativa.
El hecho de que el hombre haya sufrido una importante hemorragia que lo colocó en el límite con la muerte, permite sostener esa hipótesis.
Cabe recordar que ella buscó en internet y realizó anotaciones en una bitácora personal sobre cómo seccionar los genitales a un hombre. No obstante, la defensa insiste en que para llegar a una conclusión de homicidio será necesario probar con absoluta certeza que quiso matarlo; y eso estuvo lejos en el ánimo de la joven.
No obstante, quienes conocen el expediente opinan que la declaración del novio de la mujer será trascendente en ese sentido. Una vez que la fiscal decida si pedirá ampliar la acusación -alternativa altamente probable según dejaron trascender desde su oficina- el juicio se tendrá que interrumpir. Ello podría ocurrir apenas sea abierto el debate o en cualquier momento del proceso.
Para juzgar un homicidio debe constituirse el tribunal con jurados populares. Por esa razón habría que detener la audiencia, hacer un sorteo y designar a 12 ciudadanos que lo integren.
Acción civil. A la par de la responsabilidad penal, también se definirá la indemnización a la víctima. La lesión física significó, a la par, un profundo daño psicológico. Una de las pericias practicadas durante la investigación explicó que el aparato genital del hombre hace a su personalidad. Por esa razón es inescindible evaluar cómo transita su recuperación psicológica para determinar el daño, por las consecuencias que acarrea en el ejercicio de la sexualidad y la funcionalidad de su aparato reproductor.
Jueces. La Cámara 2º del Crimen estará presidida por Ítalo Vitozzi e integrada por Mónica Traballini y Mario Centeno.