Estancia Vik, Bahia Vik y su restaurante La Susana, y Playa Vik, son tres propiedades ubicadas en José Ignacio, Uruguay, en las que prevalecen el entorno, el lujo y el arte. Suites, búngalos, servicios, decoración, pinturas y esculturas en sincronía perfecta.
El main building de Bahía Vik, una de las tres propiedades en José Ignacio. |
CEDOC PERFIL
JUAN ERRAMOUSPE
A la hora de elegir destinos vacacionales, hay quienes prefieren el mar y quienes optan por la montaña. Tuvimos la oportunidad de conocer una colección de propiedades de lujo que se adaptan a las dos alternativas, pero vamos a hablar de la preferencia costera.
Se trata de Vik Retreats, una propuesta de alojamientos en José Ignacio, el enclave uruguayo cercano a Punta del Este que propician una experiencia que puede calificarse como inolvidable.
Con diseño y ubicación excepcional, servicios de alta gama, reconocimiento internacional por sus obras de arte y diseño de vanguardia y prácticas respetuosas con el medio ambiente, ofrecen distintas alternativas para los huéspedes más exigentes.
Las propiedades
En Uruguay, Vik Retreats está conformado por Estancia Vik José Ignacio, inaugurada en febrero de 2009, de estilo colonial y tradicional y emplazada sobre un área de 1.600 hectáreas de pasturas de campo, a ocho kilómetros de la playa de José Ignacio.
Estancia Vik José Ignacio posee un total de 12 lujosas suites y es una propiedad rebosante de arte.
Playa Vik José Ignacio –desde diciembre de 2010– es un retreat de playa contemporáneo y lujoso, también inspirado en el arte. Está ubicado en el pueblo de José Ignacio, sobre la Playa Mansa, y cuenta con tres suites en el edificio central, Escultura, y seis exclusivas casas que lo rodean.
Las casas pueden ser de dos o tres habitaciones y es el lugar ideal para familias, mientras que las suites son el espacio perfecto para parejas. Cuenta con un spa, sala de juegos, gimnasio, bicicletas y kayacs.
Bahía Vik José Ignacio y el restaurante y club de playa La Susana –de noviembre del 2014–
combinan la visión de un retreat natural y contemporáneo en un paisaje de extensas playas con las dunas naturales.
Los huéspedes se pueden alojar tanto en las 10 exclusivas suites del edificio principal como en los 11 búngalos privados de playa que tienen dos, tres, cuatro o cinco suites, con los que se totalizan 41 habitaciones sobre las dunas de Playa Mansa. Al despertar, pueden pasar desde la cama a la terraza y de allí a la playa.
Cada uno se caracteriza por presentar un exterior diferente y exclusivo, integrado con el entorno y con interiores decorados con obras de arte.
La Susana, en tanto, es el restaurante de playa de Vik Retreats, ubicado sobre las dunas de Playa Mansa, donde el decorado es el mismo mar, en un ambiente descontracturado, sencillo y a la vez lujoso. El entramado de cañas sobre las mesas dispuestas en la arena es simplemente magnífico.
El lugar preciso para familias, bodas, fiestas y reuniones corporativas o eventos sociales, con una cocina en la que, de la mano del chef Marcelo Betancourt, reinan mariscos y pescados del día, carnes y verduras de producción local, con elaboración única y personalizada.
Las tres propiedades trabajan en conjunto y ofrecen distintas opciones de paisajes acordes a la diversidad de la geografía uruguaya.
Tarifas: Estancia Vik, desde US$ 550 y Bahía Vik y Playa Vik, desde US$ 700, en todos los casos precio final, por noche, habitación doble, con desayuno y las actividades de cada retreats.
