ECONOMIA
Análisis

Alberto Fernández asumirá con más reservas, pero no alcanzan para pagar la deuda

El Gobierno entrante enfrenta en los próximos 12 meses vencimientos por más de 23.000 millones. Cómo es el panorama actual y las proyecciones.

Alberto Fernández y Mauricio Macri
Alberto Fernández y Mauricio Macri. | NA

“Cuidar las reservas” del Banco Central fue uno de los pedidos que Alberto Fernández le formuló a Mauricio Macri tras ganar las PASO del domingo 11 de agosto. Por la corrida que se desató ese mismo lunes, el Gobierno de Cambiemos tuvo que reinstalar el cepo que habían levantado en diciembre de 2015: limitaron la compra de dólares a 10 mil por mes, y la caída de los fondos del BCRA los obligó a bajar la cuota a solo U$S 200. Tres meses después, y con Fernández como presidente electo, la medida parece haber surtido efecto: las reservas que eran de 65.825 millones de dólares el primer día hábil de 2019, y cayeron a 43.406 millones el lunes 28 de octubre (después de las elecciones generales), se ubicaban en 43.558 millones el 14 de noviembre, día de la última medición oficial. Ante una mayor demanda de pesos por la época del año, y gracias a las restricciones, todo indica que la cifra que reciba el Frente de Todos el 10 de diciembre podría ser aún mayor.

Desde el oficialismo destacan que las reservas que le ceden al próximo Gobierno son más elevadas que las que dejó Cristina Fernández de Kirchner: el 10 de diciembre de 2015 había en las arcas de la entidad monetaria unos 24.862 millones de dólares, pero en Cambiemos aseguran que las reservas de libre disponibilidad (u operativas), las que se pueden usar para pagar deuda, eran nulas.

Las reservas del Banco Central se ubicaban en 43.558 millones el 14 de noviembre

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¿Cuál es el panorama para Alberto Fernández? De los 43.558 millones de dólares, se estima que las reservas de libre disponibilidad rondan entre 11.000 y 15.000 millones (el BCRA no publica la cifra exacta). Sin embargo, el Gobierno enfrenta en los próximos 12 meses vencimientos de deuda por más de 23.000 millones, lo que explica la necesidad de renegociar las obligaciones tanto con el Fondo Monetario Internacional como con los acreedores privados.

“El nivel de endeudamiento general supera ampliamente el nivel de reservas. Macri le deja 15.000 millones de dólares más a Alberto pero también entre 160 y 170 mil millones más de deuda”, puntualiza a PERFIL Andrés Asiain, economista y director del Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz (C.E.S.O.).

El aumento de las reservas y la relativa calma cambiaria se explican por el cepo que deja al Banco Central como único gran comprador posible y la cercanía de fin de año, con la consecuente necesidad de pesos por parte de las empresas para hacer frente a gastos como el medio aguinaldo o las vacaciones. Pero la tendencia puede frenarse en el corto plazo: “Esto va a parar y el Gobierno va a estar obligado a aumentar el tipo de cambio o a incrementar las restricciones cambiarias, por ejemplo cerrando las importaciones”, indica a este medio el economista y Director del Centro de Estudios Económicos de Orlando J. Ferreres y Asociados, Fausto Spotorno.

Por su parte, el analista financiero Christian Buteler considera que las restricciones cambiarias son un arma de doble filo que puede jugarle en contra al Gobierno: “Con un cepo de este nivel de dureza es muy difícil que te entre un dólar que no esté obligado a ingresar. Nadie va a traer divisas de forma voluntaria a la Argentina si sabe que luego no las puede sacar. Se puede dar momentáneamente algún periodo pequeño de suba pero siempre en una serie mediana las reservas terminan por caer, porque todos van a buscar la forma de sacar dólares por otros canales que no sean oficiales”.

Con un cepo de este nivel de dureza es muy difícil que te entre un dólar que no esté obligado a ingresar, dijo Christian Buteler

Calendario de pagos. La reservas actuales son claves para poder afrontar el pago de vencimientos de deuda que tendrán lugar hasta 2023. El primero que deberá hacer frente Fernández será apenas asuma, el 12 de diciembre: un vencimiento de LECAP por 313,8 millones de pesos. El último del año será el 20 de diciembre: Letras del Tesoro por 150 millones de dólares.

El panorama es mucho más complicado en 2020: vencen 22.800 millones de la deuda, sin contar el swap con China. Parte de los fondos están supeditados con que esté vigente el acuerdo con el FMI, aunque desde el entorno de Fernández afirman que están dispuestos a resignar los últimos desembolsos a cambio de renegociar los plazos. El peligro de default crece en el segundo trimestre, ya que en mayo hay vencimientos fuertes.

Un default en el primer semestre de 2020, el fantasma que obliga a negociar rápido

 
Cuando ponemos en la cuenta lo que tiene que pagar el BCRA va a terminar perdiendo”, analizó Buteler. Y agregó: “Los vencimientos que empiezan a correrse, no puedes generar y refinanciar; con los dólares que se quedan no podés hacer frente a tus deudas. Por eso es tan importante y urgente poder renegociar la deuda para tener un panorama un poco más despejado y no estar tan apremiado. Es preferible llegar a un acuerdo antes de caer en el incumplimiento”. 

Spotorno apuntó que podría ser posible afrontar la deuda al contar con el superávit de la balanza comercial: “Se debe tener en cuenta que la balanza de bienes y servicios tiene 13 mil millones de superávit, a los que puede acceder el Gobierno. A eso hay que ver si hay acuerdo con el FMI, y si el organismo desembolsa los 10 mil millones que quedan del acuerdo. Por ahí podría obtener una parte importante de dólares la Casa Rosada y si reestructura algo o puede colocar algún roll over ya implicaría una reducción bastante importante de la necesidad de dólares que tiene la Argentina”.

Asiain consideró que ese superávit es “muy optimista” y añadió: “Obviamente que las reservas no alcanzan para pagar la deuda actual. Y con la balanza comercial no se tienen en cuenta todos los otros gastos que tiene el país”.