La fachada del Banco Central de la República Argentina quedó "como nueva". Tanto es así, que la restauración que se estrenó este jueves logró que los colores del edificio de la calle San Martín 275 quedaran idénticos a los originales, durante su construcción en 1876. La nueva fachada llegó en momentos de estrés de las reservas que atraviesa la entidad monetaria, debido a la fuerte sequía de dólares, que le provocó que sus tenencias internacionales se encuentren en terreno negativo, por encima de los USD6.000 millones, según las estimaciones de consultoras y especialistas.
"Si van a romper cristales, que sean de Bohemia", rezó la primera expresión de alegría que surgió desde el BCRA por el nuevo frente del edificio más antiguo que alberga a un banco en la Argentina. Esa expresión, que hace referencia a la canción del cantautor español Joaquín Sabina en su tema Cristales de Bohemia, sirvió como antesala al anuncio del estreno de "restauración, con los colores originales". "Y devolviendo esplendor también a los símbolos de la Patria", señalaron desde la entidad que conduce Miguel Pesce.
El dólar blue volvió a escalar y cerró a $553 marcando un nuevo récord
El edificio fue diseñado por el arquitecto Enrique Hunt y, originariamente, fue sede del banco Hipotecario de la Provincia de Buenos Aires. Es la construcción bancaria más antigua de la ciudad de Buenos Aires que aún está en pie. Su construcción demandó cuatro años y finalizó en 1876. Este edificio es un exponente de la corriente italianizante del segundo período, ya que su ornamentación es mucho más abundante que la que se encuentra en el inmueble de San Martín 216. La fachada es monumental, con columnas y pilastras que abrazan los dos pisos.
"En 2022, con la supervisión de la Comisión Nacional de Monumentos, de Lugares y de Bienes Históricos, se inició la obra de restauración del edificio de más de 140 años de historia que fue declarado Monumento Histórico Nacional a través del Decreto Nacional 1.563 de 2005", señalaron desde la entidad monetaria.
Un contraste con las reservas
La remodelación del edificio histórico, que muestra a un BCRA renovado, contrastó con la situación de debilidad en sus reservas por la que atraviesa la entidad monetaria en la actualidad. Si bien el Banco Central concretó compras por USD430 millones esta semana, los analistas pronosticaron que esa racha positiva "no va a durar mucho". Sucede que la adquisición de divisas fue impulsada por las liquidaciones del sector agropecuario, beneficiado por una medida transitoria, según destacaron.
Para continuar con uno de los vectores que le permitieron ingresos más dinámicos, el Gobierno reimplementó el Programa de Incremento Exportador (PIE) para las economías regionales con un tipo de cambio diferencial de $340 para las exportaciones hasta el 31 de agosto. Esa decisión fue parte del paquete de medidas que el ministro Sergio Massa y su equipo económico acordó con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para destrabar el acuerdo de revisión de la quinta etapa del Staff Level Agreement.
Economía celebró la compra de dólares del BCRA, que acumula US$430 millones en la semana
En tanto, la autoridad monetaria compró este jueves USD219 millones en el Mercado Único y Libre de Cambios (MULC), en una jornada en la que el dólar agro aportó liquidaciones por USD271 millones. La pregunta que se realizaron los analistas del mercado es si los desembolsos que gatillará el FMI, producto del acuerdo alcanzado, van alcanzar para hacer frente al pago de los vencimientos y para intervenir en el mercado cambiario una vez finalizado agosto, en un contexto electoral y en que las reservas netas son negativas en alrededor de US$ 6.000 millones.
La Argentina deberá pagarle el próximo lunes al propio Fondo unos USD2.700 millones; mientras que el martes siguiente deberá cubrir intereses de la deuda externa por otros USD800 millones. En total, deberá contar con USD3.500 millones. Además, aún falta conocerse la letra chica del “principio de acuerdo” con el organismo anunciado por el ministro Massa, que demoró más de lo previsto por el surgimiento de desencuentros durante las negociaciones.
El calendario del REM le sumó polémicas para el BCRA
El Banco central decidió postergar la difusión del Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM), que habitualmente lo hacía una semana antes de la publicación del Índice de Precios al Consumidor (IPC) de parte del INDEC. El argumento, según se señaló desde la entidad monetaria, se debió a "los yerros de las consultoras en las estimaciones de inflación de los últimos meses" y a que "la venían pifiando feo". La nueva fecha se pegó a la inflación oficial, de modo que esos augurios quedarán para después de las elecciones primarias.
La oposición acusó al Banco Central de hacer campaña para Sergio Massa
Ante ese escenario, economistas opositores y consultores privados acusaron al Banco Central de beneficiar al ministro de Economía, Sergio Massa, con la postergación de la difusión del REM. Incluso, deslizaron que el precandidato presidencial de Unión por la Patria es el autor intelectual de la movida. Para muchos, podría repetirse la polémica que generó una decisión idéntica del INDEC, que había anunciado difundir la inflación recién después de las elecciones provinciales en Tucumán, Salta, Tierra del Fuego, La Pampa y San Juan bajo el argumento de que las “fechas que coincidían con la veda” vigente. El organismo de medición oficial debió dar marcha atrás con esa medida.