En el primer sorteo del programa del plan viviendas que lanzó el gobierno nacional, el viceministro de Economía, Axel Kicillof, acusó a los especialistas que cuestionan la marcha del plan económico de practicar "un cacareo sin ningún sentido", pero admitió que "hace daño" porque algunas personas "todavía los escuchan".
Kicillof empezó así el sorteo en la sede de la Lotería Nacional, junto al titular de la ANSES, Diego Bossio, con el que se prevé la construcción de 100.000 viviendas.
Del acto, participan también el secretario general de la ONABE, Martín Reibel Maier; el presidente del Banco Hipotecario, Eduardo Elsztain, y el titular de Lotería Nacional, Roberto Armando Lopéz.
El Comité Ejecutivo es el encargado de explicar los detalles del sorteo, para unos 22.000 aspirantes a los créditos hipotecarios, que previamente pasaron por las entrevistas realizadas en el Banco Hipotecario, y ya cuentan con terreno propio.
A las 11.30 se inició el sorteo que se realiza entre los postulantes con terreno, para la obtención de los créditos hipotecarios que ingresaron en esta primera etapa.
Desde la ANSES recordaron que "el hecho de haber sido elegido en el sorteo, no garantiza la efectiva obtención del crédito, el cual estará sujeto al efectivo cumplimiento de las políticas crediticias del Programa en un plazo de 90 días corridos desde la publicación de los resultados
Kicillof, por su parte, aprovechó el acto para criticar la "mala intención" de los economistas de la oposición y advirtió su "inconsistencia" porque "cuando la economía crecía al 9 por ciento anual era por las buenas perspectivas del mundo y si a la Argentina le va mal no es por el mundo sino por las medidas del Gobierno".
Además, el funcionario defendió la inversión de fondos de la ANSeS para el sector productivo y advirtió que es "privatista, noventista y reaccionista sostener que la plata de los jubilados se puede poner sólo en el bolsillo de los jubilados".