Derrumbe del superávit fiscal primario: bajó casi 50%
El secretario de Hacienda,
Juan Carlos Pezoa, fue el
solitario encargado de dar la mala nueva. Reconoció que las metas fiscales fijadas
en el presupuesto
podrían no cumplirse
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DYN
El secretario de Hacienda, Juan Carlos Pezoa, anunció hoy que el superávit fiscal primario de febrero fue de 1.602,9 millones de pesos, lo que implica baja de 49,5 por ciento con relación al saldo obtenido en el mismo mes de 2008. En el bimestre el superávit se ubicó en 3.605 millones de pesos, un 45 por ciento menos que en igual período del ano anterior.
Los ingresos fiscales de febrero fueron 17.695,4 millones de pesos, un 13,1 por ciento más que en febrero de 2008; mientras que los gastos se ubicaron en 14.762,2 millones, con un alza interanual de 20 por ciento. Durante una conferencia de prensa Pezoa dijo que en función de la situación mundial "nosotros no estamos en un pozo, mantenemos la conducta fiscal y la Argentina se mantiene en un crecimiento razonable".
No obstante, el secretario de Hacienda reconoció que las metas fiscales fijadas en el presupuesto podrían no cumplirse, dado el cambio de escenario internacional. Pezoa enfatizó que "estamos en una situación especial pero este gobierno mantendrá una política fiscal prudente".
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Con el fin de justificar un desfasaje entre lo presupuestado y el resultado real, el funcionario enfatizó: "Seamos realistas; todos los días se están modificando los números para abajo. No es el 2008, estamos en 2009, que es diferente". Consultado sobre el efecto fiscal de la creación del fondo coparticipable con las retenciones a la soja, Pezoa señaló que "lo anunciado no afecta en absoluto el desenvolvimiento de las metas fiscales de 2009". Sostuvo que "no son 'gastos excesivos' como lo quieren mostrar algunos sino gastos productivos", al tiempo que afirmó que "no puede haber problemas de endeudamiento".
Pezoa explicó que el deterioro que se produjo en el comercio internacional provocó una baja en la recaudación, influyendo además en el nivel de superávit fiscal. Al justificar el aumento en el nivel de gastos, señaló el "gasto de capital" por mayores flujos hacia los programas de viviendas y viales y a la financiación de los proyectos que encaran las estatales ENARSA y AySA. Asimismo subrayó la suba en las transferencias a provincias, fondos que tiene como principal orientación el financiamiento de obra pública.
