En los últimos cuatro años, las estaciones de servicio de todo el territorio argentino perdieron el equivalente a 5.5 meses de facturación. Si bien los números de volúmenes de venta siguen mostrando leves incrementos mes a mes, no alcanza para revertir la “crítica situación” del sector que sobrevive en un contexto de alta inflación, atraso en los precios y paritarias sin techo.
“Desde hace cuatro años estamos operando en modo supervivencia" advirtió Gabriel Bornoroni, presidente de la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines de la República Argentina (CECHA).y explicó que primero fue la recesión, luego la pandemia y ahora un contexto económico de incertidumbre, marcado por nuevos picos de inflación, el atraso en los precios; la escasez de combustibles y paritarias que superan la capacidad de pago del sector.
A comienzos de 2018, cuando comenzó la última recesión en Argentina, el mercado minorista de combustibles líquidos perdió de manera acumulada ventas por 8.2 millones de metros cúbicos; lo que representa 5.2 veces el volumen total vendido durante abril de 2018, el mes tomado como referencia, sostiene el informe de expendio de combustibles elaborador por CECHA.
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El atraso de precios de combustibles agravó aún más la situación en un contexto en que el resto de los precios de la economía continúa subiendo. Por ejemplo, mientras el precio de la nafta súper se incrementó 17.5% desde junio de 2021 hasta marzo de 2022, los precios al consumidor se incrementaron 39,7%; los precios de los alimentos y bebidas se incrementaron 43.8%, el precio de la lecha fresca en sachet se incrementó un 29.1% y el precio del pan francés se incrementó un 45.4%; tomando solo algunos productos de referencia y sustentados con datos oficiales del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).
Consecuencias de la evolución de precios
El aumento de los precios relativos derivó en un peor desempeño de la facturación total de las estaciones de servicio del país, medidas a precios constantes, es decir, descontando la inflación, que el desempeño de los volúmenes.
En marzo pasado, la facturación total a precios constantes estuvo todavía 7.7% por debajo del nivel registrado en marzo de 2018, cuatro años atrás. En ese período de cuatro años, la pérdida total de facturación equivale a 5.5 meses de facturación a precios de inicio del período.
Según el informe elaborado por CECHA, el volumen total de combustibles líquidos vendido en el canal minorista nacional se incrementó durante marzo de 2022 un 5.6% con incrementos en 23 de las 24 jurisdicciones provinciales. En comparación con abril de 2018, el total de ventas fue 3.2% mayor durante marzo de 2022, situación que ocurrió en 12 de las 24 jurisdicciones provinciales, en 5 de las cuales esto se debió exclusivamente al desempeño de gasoil.
Si bien las estadísticas revelan subas leves en las ventas, no alcanzan para que las estaciones alcancen una rentabilidad razonable. El punto de equilibrio de una estación de servicio con 2 operativos de playa por turno, 1 encargado de cubrir los francos, 1 encargado de turno y 1 empleado administrativo fue de 305,000 litros, volumen mensual que no alcanza el 52.8% de las estaciones de servicio del país, explicó Gabriel Bornoroni.
SE / LR
