El Gobierno aumentó durante el año pasado un 84 por ciento los subsidios a empresas públicas y privadas. En total, se desembolsaron 6838 millones de pesos. Así lo indica un informe de la Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública (ASAP).
Uno de los sectores más beneficiados por los subsidios fue el energético. En total, fueron 3310 millones, es decir un 88 por ciento más en relación con el 2005. Allí están incluidos los 1453 millones entregados a la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico SA (CAMMESA) y los 589 millones que recibió el Fondo Fiduciario para el Transporte Eléctrico Federal. Además de esos fondos, CAMMESA recibió 337 millones en concepto de préstamos.
En total, entre subsidios y préstamos, durante 2006 se destinaron un total de 3780 millones al sector energético, es decir, un 60 por ciento más que el año anterior.
Pero el Gobierno no tuvo sólo en cuenta la crítica situación energética a la hora de otorgar subsidios. Otros dos sectores en crisis también fueron favorecidos. Uno fue el del transporte automotor y de pasajeros, que recibió 1810 millones (un 107 por ciento más que el año anterior) y el otro, el rural y forestal, con 175 millones.
En cuanto al desglosamiento de las empresas públicas favorecidas, el informe señala que las principales receptoras de fondos fueron Enarsa –con 307 millones-; Yacimientos Carboníferos Fiscales –265 millones, es decir un 36 por ciento más-; el Sistema Nacionale de Medios Públicos –169 millones- y el Ente Binacional Yacyretá con 132 millones.