La medida del Gobierno generó principalmente un gran temor respecto del rendimiento de varios fondos de inversión, que, al estar integrados en gran parte por fondos provenientes de las AFJP, podrían verse seriamente afectados por la eventual desaparición de ese tipo de actores.
Ello, sumado al movimiento recesivo de los mercados de New York, Europa y Asia, produjo desde temprano un creciente malhumor y corridas en la City porteña, en la que la principal consigna de los inversores medianos pareció ser deshacerse de aquellos papeles comprometidos en inversiones de las que participan las carteras que constituyen las AFJP.
Por el lado de las propias administradoras de jubilaciones y pensiones, prácticamente no hubo negocios, si bien pudieron al menos volver a operar tras ser inhabilitadas el martes pasado en el marco de la causa que el fiscal Guillermo Marijuán abrió por presunta administración fraudulenta.
Finalizada la ronda, el Indice General de la Bolsa registraba 55.086,45 puntos, con acciones negociadas por 41,6 millones de pesos (12,5 millones de dólares), dos subas, 50 bajas y cinco títulos sin cambios.