Las presentaciones por conflictos de intereses mantienen en vilo al Gobierno y ponen en escena a personajes históricos del mundo corporativo asociado con la familia. Así ocurrió esta semana con el fiscal federal Jorge Di Lello, que volvió sobre las concesiones de rutas a Avianca, una empresa que en la Argentina busca operar a partir de una flota que pertenecía a Macair, empresa de Franco Macri, y sus ex colaboradores, y que derivó en la imputación del presidente Mauricio Macri.
La denuncia penal recae también sobre su padre Franco (como titular de la empresa Sideco), el secretario general de la Presidencia Fernando de Andreis, además de los titulares de Avianca –el presidente Germán Efromovich y el CEO Carlos Colunga– por asociación ilícita, negociaciones incompatibles, defraudación contra la administración pública y tráfico de influencias en la concesión de rutas aéreas. La imputación también alcanza al director de Logística de la Nación, Carlos Cobas; al hijo de Carlos Colunga, Diego, al ministro de Transporte Guillermo Dietrich –encargado de aprobar finalmente las rutas a Avianca– y al titular de la ANAC, Juan Pedro Irigoin y al director de Transporte Aéreo, Hernán Gómez.
La denuncia base proviene de los diputados nacionales Rodolfo Tailhade y Juan Cabandié, del Frente para la Victoria, que cuestionan la venta de Macair Jet a Avianca –consideran que fue sólo un cambio de razón social– y los negocios vinculados a la aerolínea colombiana.
“Terminar con esto”. El caso de Carlos Colunga, el ex CEO de la línea aérea de Franco Macri, ahora directivo de Avianca, es conocido. Pero Colunga, además, también participa con su hijo Diego en distintas sociedades. Una de estas empresas, Unicos Air, brindó servicios a Mauricio Macri durante la campaña y fue propuesta para llevar adelante los vuelos privados para el Estado ya bajo el Gobierno de Cambiemos, después de que el Presidente anunciara la revisión de la flota oficial, uno de los puntos que los denunciantes piden investigar.
“Estoy preparando una demanda judicial para terminar con esto de una buena vez”, dijo ayer Colunga a PERFIL, ante la consulta sobre la investigación en su contra. No especificó ni contra quién ni por qué motivo, pero adelantó que prepara un contrataque. Tampoco ratificó o desmintió los rumores de que se alejaría de la empresa, que reveó en su última edición la revista Noticias. En diciembre, en diálogo con PERFIL, además, se había mostrado crítico de la gestión de Isela Costantini en Aerolíneas Argentinas y remarcaba que podría brindarle servicios a la empresa estatal para que cubriera más barato los trayectos con menos pasajeros.
El hijo y el socio. Su hijo Diego Colunga, a su vez, es socio de un funcionario de la Casa Rosada: Carlos Martín Cobas, Director de Logística de Presidencia, un área que funciona bajo el control de Fernando de Andreis, el secretario general de la Presidencia que también fue imputado por Di Lello a partir de la desactivación de la flota oficial. PERFIL se contactó con De Andreis y Cobas pero no hubo respuesta.
En 2011, Cobas se había asociado a los Colunga (padre e hijo) en Patagonia Flight Services SA y además integró el directorio en otras empresas como AJS Jet SA, una sociedad de Diego Colunga con una firma irlandesa. En 2014, AJS Jet presentó un pedido de quiebra contra Macair Jet. Tres años antes, Cobas se presentaba como el representante de Aerochaco, una línea aérea que operaba Macair. Según los registros de la AFIP, Cobas tiene dos empleadores: Avian Líneas Aéreas, desde abril de 2006 hasta la actualidad. Y a partir de marzo de 2016 –y hasta hoy– también figura en la nómina de la secretaría general de la Presidencia de la Nación.
A la medida. A Avianca se le aprobaron el 100% de las rutas pedidas, incluso dos que habían sido cuestionadas por Aerolíneas Argentinas por la competencia: Buenos Aires-Porto Alegre y Buenos Aires-Montevideo. Por eso también recae la denuncia sobre Irigoin que dirige la ANAC –hermano de Jorge, el CEO del Correo Argentino estatal y ex director del Correo bajo el control de Socma, en el otro caso reciente de conflicto de intereses de la familia Macri y el Estado–. Avianca ya tiene su hangar en Aeroparque. Y un avión listo en Francfort para empezar a operar en Buenos Aires. Esperaban hacer la presentación formal de la flota pero las denuncias suspendieron el evento y hasta amenazan con retirarse de la operación.
