El conflicto con los fondos buitre tiene en vilo a las provincias. En particular aquellas que, o bien tienen déficit fiscal, o querían financiar obras emitiendo bonos. Por ello, para los gobernadores, muchos de estos con aspiraciones presidenciales y otros con la idea de ser reelegidos, es fundamental que el Gobierno logre finalmente un acuerdo con los acreedores.Incluso, cuando aún había incertidumbre sobre un posible default, varios ministros de economía provinciales preparaban una cumbre para analizar sus cuentas.
Una de las provincias más complicadas es la de Buenos Aires. Si bien en la administración de Daniel Scioli aseguran que las finanzas de este año terminarán ordenadas y con el pago de aguinaldos, se habían preparado para colocar entre US$ 700 y mil millones en el exterior con el objetivo de estar tranquilos en 2015, en especial durante la campaña electoral. El ex motonauta teme que, como en 2012, el Gobierno no le envíe los fondos que necesita. Tras el acuerdo con el Club de París estaba todo listo para que se lance un bono provincial, sin embargo, la emisión de deuda se retrasó y por ello, en las últimas horas, hubo reproches en el gabinete hacia el equipo económico del gobernador por no haber colocado deuda en dólares, a pesar de ya poseer la autorización de la Legislatura bonaerense.
“El problema de la Provincia es que el 95% se va en salarios y gasto corriente”, advirtió el diputado provincial de Unión Celeste y Blanco, Mauricio D’Alessandro. Según explicó, de $ 180 mil millones de presupuesto el año pasado sólo tres mil millones fueron para obras y hoy el déficit consolidado supera los $ 10 mil millones.
La otra provincia que quedó a la expectativa es Mendoza. Es que el gobernador kirchnerista, Francisco “Paco” Pérez, tenía todo listo para emitir un bono de 200 millones de dólares para hacer frente al déficit de la provincia. Ayer tuvo que admitir que no estaban dadas las condiciones. Peor aún: en la semana el gobernador dijo que si no podía tomar deuda peligraban los sueldos de julio.
“Desde un primer momento Paco Pérez condicionó la obra pública a los créditos, y esto no debería ser así porque existe un fondo específico para obras. El tema es el crecimiento del gasto del Estado. Si no logra tomar deuda deberá ajustar el gasto”, opinó la diputada Patricia Giménez, quien trabaja con Julio Cobos. En Santa Fe también esperan la resolución con los fondos buitre. Es que el socialismo busca colocar un bono de $ 2.200 millones para obras. Según explicó el diputado provincial del PRO, Federico Angelini, el problema es el crecimiento del gasto para salarios, que se lleva el 93% del presupuesto. “En seis años metieron 14 mil empleados nuevos”, agregó.
Córdoba, en tanto, acumula una deuda de $ 14 mil millones, que está dividida una parte en dólares y otra en bonos. Por su lado la municipalidad de Córdoba esperaba colocar una nueva serie de letras por 40 millones de pesos. En Chaco se viene aplicando una política de ajuste. El año próximo se deberán pagar más de US$ 40 millones de vencimiento de deuda. Finalmente en la Ciudad el PRO quería emitir deuda en julio por 890 millones de dólares para canjear los bonos porteños con vencimientos de 2015 y 2017, y otra parte para obras.