En nueve meses, las cuentas públicas acumulan un déficit de $ 22.107 millones según informó ayer el Ministerio de Economía. La ampliación del rojo en el año está explicada por el gasto –acelerado desde antes de las primarias abiertas– y el pago de deuda.
En septiembre, pese al auxilio de la Anses y el Nación, de más de $ 12 mil millones, el rojo mensual fue de $ 4.842 millones, casi el doble que en el mismo mes del año pasado, cuando alcanzó los $ 2.589 millones.
Los gastos corrientes aumentaron 53% en septiembre, por arriba del nivel de crecimiento de los ingresos, que no obstante también mostraron un buen desempeño interanual con una suba del 51% sustentada en la recaudación.
El gasto fue impulsado por subsidios y obra pública antes de las elecciones de octubre, lo que explica un aumento del 53% en los gastos de capital por las transferencias a provincias y municipios para “infraestructura social básica”, según el informe de Hacienda, a cargo de Juan Carlos Pezoa.
Antes del pago de la deuda, las cuentas cerraron con un superávit primario de $ 412,5 millones, que en el año asciende a $ 6.855,7 millones. Las transferencias realizadas por Anses crecieron 94% para cubrir los aumentos de asignaciones familiares. También se repartió lo recaudado por las retenciones a la soja: la transferencia en concepto del Fondo Federal Solidario creció 119,5%, según Hacienda. Del lado de los ingresos, lo que más creció fue la recaudación de IVA y Ganancias, mientras que las contribuciones a la seguridad social crecieron 29,2%.