ECONOMIA
dificulta la baja de la inflación

Noviembre llegó con golpe al bolsillo: suben gas, luz, agua, nafta, celulares y transporte

Estos aumentos seguirán presionando la inflación y pondrán escollos en los planes del oficialismo para que rompa nuevamente el 2%. Las consultoras privadas estiman que para octubre el IPC se ubicaría entre 2 y 2,4%, una posible suba respecto del 2,1% de septiembre. El equipo económico necesita que los precios desaceleren en un contexto de magras paritarias y frente a salarios que se encuentran, en promedio, un 4,7% por debajo de noviembre de 2023.

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Incrementos. En octubre la inflación se ubicó por encima del 2%, de acuerdo a las consultoras. | cedoc

Con las elecciones ya concluidas, el Gobierno encara varios desafíos hacia adelante, como continuar con el proceso de desaceleración de la inflación, que se vio truncado en la previa electoral.Se trata de una dinámica clave en medio de las magras paritarias. Las consultoras privadas estiman que para octubre el IPC se ubicaría entre 2 y 2,4%, una posible suba respecto del 2,1% de septiembre, a la vez que noviembre llegó en principio con casi una decena de aumentos que golpearán al bolsillo: gas, luz, agua, combustibles, prepagas, telefonía, alquileres, transporte y peajes.

El equipo económico oficializó un aumento del 7,2% en el precio del gas. El impacto en la tarifa para los usuarios será de 3,8% en promedio. La Resolución 1698/2025 del Ministerio de Economía, publicada en el Boletín Oficial, instruye al Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas) a aplicar los nuevos valores: “El recargo previsto en el artículo 75 de la ley 25.565 y sus modificatorias será equivalente al 7,20% sobre el precio de gas natural en el Punto de Ingreso al Sistema de Transporte (PIST), por cada metro cúbico (m³) de nueve mil trescientas kilocalorías (9.300 kcal) que ingrese al sistema de ductos en el Territorio Nacional”.

En el caso de la boleta de luz, el lunes se conocerá el dato concreto, aunque desde la cartera de Energía sostienen que el aumento de la electricidad será similar al gas. También, y de acuerdo al esquema que se implementa desde principios de año, Agua y Saneamientos S.A. (AySA) implementará un incremento mensual del 1%.

También, el Gobierno actualizó los impuestos a los combustibles, lo que impactará entre 1% y 1,5% en los precios de la nafta y el gasoil.

En esa línea, aquellos inquilinos que se rigen por la derogada ley de Alquileres, tendrán en noviembre una suba en torno al 38%, de acuerdo al índice de contratos de locación (ICL). En el caso de los servicios de cable, telefonía e internet, las compañías anticiparon a sus clientes que el aumento será de hasta un 3%, según el servicio y la operadora.

En las empresas de medicina prepaga, el servicio aumentará entre 2,1 y 2,9%, dependiendo del plan y la empresa. El boleto de colectivo en el AMBA se incrementará 4,1%.

“Desde el 1° de noviembre, el pasaje mínimo de colectivo con Sube registrada se va a ubicar en $ 624. Mientras que el boleto de subte aumentó a $ 1.157,59. Hoy 40 viajes en subte (2 por día) representan el 3,2% del salario de un trabajador privado registrado. Desde el cambio de gestión, el pasaje de subte subió, en términos reales, un 317%; el pasaje en colectivo 239% y el de tren un 284% en términos reales. Esto redundó en una merma del uso en el AMBA, caída que todavía no remonta: los tres medios de transporte fueron menos usados que en 2024”, remarcaron desde el Instituto Argentina Grande (IAG). Desde hoy también rigen nuevos valores de los peajes porteños.

Estos aumentos seguirán presionando la inflación y pondrán escollos en los planes del oficialismo para que rompa nuevamente el 2%. Las consultoras privadas estiman que octubre se ubicaría entre 2 y 2,4%, frente al 2,1% de septiembre.

A su vez, esto se da en un contexto donde los salarios registrados aún se encuentran, en promedio, un 4,7% por debajo de noviembre de 2023. Esta caída sería del 10,8% si se deflacta por la nueva canasta del IPC, que el Indec implementará formalmente a partir de enero de 2026.

“Los trabajadores públicos son quienes se llevan la peor parte del retraso salarial, con un 13,2% de pérdida y con un ascenso excesivamente lento. Tampoco se observa una mejora para el caso de los trabajadores registrados privados, que recién en agosto vuelven a tener niveles similares a los de noviembre de 2023, mientras que en lo que va del 2025 se encuentran orbitando en un 1% por debajo de estos valores”, destacó la consultora Vectorial.