Santa Fe presentó ayer ante la Legislatura el proyecto de presupuesto para 2026 con foco en el equilibrio fiscal. El ahorro proyectado asciende a $ 1,75 billones, que permitirá financiar el 91,7% de los gastos de capital. El documento prevé un total de recursos por $ 14,1 billones y gastos estimados en $ 14,1 billones, lo que arroja un equilibrio técnico financiero de $ 6.911 millones.
Los ejes de gestión, como en 2025, se centran en seguridad, educación, salud, infraestructura productiva y obra pública, áreas que el gobernador Maximiliano Pullaro definió como prioritarias. “Formulamos el presupuesto con lógica de austeridad y eficiencia, buscando maximizar las prestaciones y generar el mayor excedente posible para invertir a futuro”, explicó el ministro de Economía, Pablo Olivares. Subrayó que para la formulación del presupuesto se basaron en “equilibrio, eficiencia, responsabilidad y austeridad como filosofía de gestión, además de la transparencia y la planificación con mirada de futuro”.
Uno de los ejes más relevantes lo mantiene en la seguridad. Para 2026 se proyecta una inversión de $ 1,7 billones, de los cuales $ 1,5 billones corresponden al Ministerio de Justicia y Seguridad y a la Unidad Ejecutora. Esto representa un incremento del 45% respecto del ejercicio anterior.
En salud, los recursos previstos ascienden a $ 1,5 billones. El Ministerio de Salud dispondrá de $ 1,1 billones, mientras que $ 49.637 millones se destinarán a la compra de medicamentos. Durante 2025, la compra centralizada permitió reducir en un 87% el valor de los medicamentos respecto del precio de venta al público, lo que posibilitó ampliar el volumen de adquisiciones.
La cartera de Educación contará con $ 2,6 billones, y se prevén $ 220.010 millones para gasto de capital destinado a infraestructura educativa. Además, se contemplan $ 81.975 millones para el Boleto Educativo Gratuito, $ 88.910 millones para comedores y copa de leche, y $ 46.715 millones para el programa mil Aulas, el Fondo de Asistencia de Necesidades Inmediatas (FANI) y mejoras edilicias en todos los niveles.
En infraestructura productiva, el presupuesto asigna $ 673.045 millones, con $ 296.639 millones destinados al Ministerio de Desarrollo Productivo. Para obras públicas y transferencias de capital, se proyectan $ 1,8 billones. Además de la continuidad de los proyectos en ejecución, se incluyen inversiones para el recambio de redes de distribución de Aguas Santafesinas ($ 83.962 millones), el Programa de Obras Urbanas ($ 55.009 millones) y los grandes acueductos ($ 36.555 millones).
Federalismo. El Fondo de Garantía del CFI concretó su primera participación como avalista en una emisión de obligaciones negociables, en respaldo al ingreso al mercado de una Pyme. El organismo incorporó así una nueva herramienta destinada a impulsar el financiamiento productivo. Se reflejó en el resultado interés inversor. El secretario general del CFI, Ignacio Lamothe, señaló que “el financiamiento productivo es clave para el desarrollo federal”.