Como consecuencia de los bloqueos de usinas que comenzaron ayer por la mañana los tamberos de Santa Fe en protesta por la decisión oficial de fijar el litro de leche para la producción exportable en 0,78 centavos el litro, podrían comenzar a verse signos de desabastecimiento en el mercado interno.
La medida “es por tiempo indeterminado, hasta que no haya una negociación clara” con el Gobierno, expresó a La Nación Oscar Poi, coordinador de los grupos de productores que bloquearon las plantas. Los mismo aclaró Gustavo Colombero, presidente de la Federación de Centros Tamberos provincial, sobre el lock out iniciado ayer a las seis de la mañana.
La respuesta de la empresa Sancor, una de las bloqueadas, llegó por medio de un comunicado. La compañía señaló que la medida de fuerza " pone en riesgo la actividad productiva, las fuentes de trabajo y el abastecimiento de productos".
Tampoco quedó fuera de la critica la metodología elegida por los tamberos "por parte de productores que no se avienen al diálogo, buscan imponer su punto de vista a toda costa y generan la posibilidad cierta de que el sector entre en un caos".
Por su parte, el coordinador de los grupos que iniciaron la medida de fuerza desmintió la posibilidad de un faltante de leche en el mercado. "Esto no puede provocar desabastecimiento; si lo hay, lo provoca la misma industria", respondió.
La palabra del Gobierno. El responsable del área de agricultura, Javier de Urquiza, criticó con dureza el accionar de los tamberos. "Las amas de casa hoy tienen que estar pendientes de bloqueos a empresas elaboradoras de un producto tan sensible en la dieta de niños y adultos como es la leche", sostuvo.
En ese sentido, agregó que "los productores y dirigentes que sugieren y definen en forma caprichosa los bloqueos a las empresas lácteas, están faltos de la sensatez con la que se debe contar para reflexionar y construir alternativas posibles para destrabar el problema".
Luego, esbozó una solución: "La única forma que conozco de lograr un entendimiento entre puntos distantes es comunicándose, y lo que llama la atención es que el diálogo entre los sectores y el Gobierno fue una práctica permanente de la mesa lechera, la cual debería reanudar cuanto antes sus debates a los efectos de salvar las diferencias que hoy se presentan".
El flamante gobernador de Santa Fe, el socialista Hermes Binner, aseguró que le llevará una propuesta de diálogo con todos los sectores del rubro lechero a la presidenta Cristina Kirchner. " Es un buen momento para que el gobierno nacional escuche los reclamos", remató.