La Argentina tiene 170 millones de hectáreas que explotan 300 mil productores, quienes están representados por cuatro entidades agrarias.
Además de la Sociedad Rural, que agrupa a los ganaderos que poseen el mayor porcentaje de la tierra en la Argentina, agrupa a los productores Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro) y Federación Agraria Argentina (FAA).
La CRA representa a los chacareros medios que tienen por lo general entre 200, 300 y hasta 1000 hectáreas. El dirigente de esta entidad es Mario Llambías, un productor oriundo de General Belgrano y de General Villegas, en la provincia de Buenos Aires. Es un agrimensor que comenzó su carrera en la Asociación de Fomento Rural de General allá por 1972.
Llambías fue presidente de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap), integrante de CRA, y en 2003 fue elegido presidente de Confederaciones Rurales. En la última elección, en 2005, asumió la presidencia.
La CRA es una entidad federal que reúne a productores de todo el país. Llambías siempre se mostró en defensa de las cuestiones federales y fue uno de los hombres de campo que más criticó al Gobierno por la inflación.
Carbap tiene como titular ahora a Pedro Apaolaza, un dirigente que habla sin eufemismos.
Coninagro nuclea en su mayoría a los cerealeros, y entre sus miembros hay muchas cooperativas, pero también representa a productores de arroz, algodón, lana, té y tabaco. El presidente es Fernando Gioino, el hombre con más bajo perfil de los cuatro dirigentes agrarios.
Gioino nació en Córdoba y en 1975 fue presidente del Consejo de Administración de SanCor. Además del bajo perfil, es un dirigente que apuesta al diálogo y no se le conocen declaraciones demasiado combativas. Fue el hombre que más apostó a llegar a un acuerdo con el Gobierno durante el conflicto del campo, lo que le valió muchos enojos desde la comisión interna.
La Federación Agraria Argentina (FAA) agrupa a 100 mil productores agricultores y es que representa a los ruralistas más pequeños. Su presidente es el santafesino Eduardo Buzzi, el más combativo de los cuatro gigantes del campo.
Buzzi fue elegido presidente de la FAA en el año 2000, antes había sido secretario gremial durante seis años. Al principio tenía afinidad política con el Gobierno kirchnerista pero la relación se quebró en 2006, cuando el ex presidente “dejó de escuchar los reclamos”.
A estas cuatro entidades, se suma el Frente Nacional Campesino, creado en abril, que defiende la defensa de los recursos naturales y la resistencia contra los desalojos. No queda claro a quiénes representa y ayer fueron recibidos por Alberto Fernández, en clara oposición a las cuatro entidades.