A pesar del feriado del 25 de mayo, el ministro de Economía, Martín Guzmán, y sus principales asesores se mantienen a pleno con diversos contactos con los representantes de los acreedores externos, continuando las gestiones por la reestructuración de la deuda, al tiempo que se ratificó que la operación de canje propuesta cerrará definitivamente el 2 de junio.
Así lo aseguraron a PERFIL fuentes del Gobierno Nacional, quienes subrayaron que ya no habrá más postergaciones para cerrar el capital de la reestructuración de la deuda, con la fecha ya establecida del 2 de junio para la finalización de la misma, en tanto que el 3 de junio se brindará la información respectiva.
Paralelamente, las mismas fuentes aseguraron que desde el mismo comienzo de la semana, a pesar del feriado, el ministro Guzmán y sus principales asesores continúan trabajando, abocados a las gestiones con los representantes de los fondos de inversión, a fin de seguir puliendo "detalles" que puedan acercar las posturas entre las partes y así terminar de cerrar hacia la fecha límite un acuerdo con los acreedores externos.
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PERFIL ya anticipó que en el Ministerio de Economía se han estudiado algunos cambios a la propuesta original, lo que hizo que el panorama entre el Gobierno y los bonistas se presenta más alentador. Básicamente, en el Gobierno admiten que habría algunas modificaciones en cuanto al período de gracia, "alguna concesión" en la quita de intereses y mejora en la tasa promedio.
Con ese combo, algunas fuentes ligadas a la negociación estiman que de 32 dólares por cada lámina de 100 dólares en los nuevos bonos se podría llegar a una cifra que oscilaría entre 40 y 45 dólares, mientas que los acreedores aún insisten con un valor de 55 dólares como mínimo.
De todas formas, empieza a observarse un acercamiento considerable, teniendo en cuenta la diferencia abismal que existía cuando comenzaron las negociaciones, que significó en definitiva para el Gobierno el costo de asumir dos postergaciones de la fecha original para el cierre del canje.
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A su vez, en el primer cierre, el nivel de adhesión apenas si superó el 17 por ciento, lo cual implicó un duro golpe para el gabinete económico. El punto central es que esta mejora implica también un desafío muy fuerte en materia fiscal, en un país que quedará terriblemente golpeado en su capacidad económica por la cuarentena del coronavirus.
Si bien nadie quiere brindar una cifra exacta, entre algunos especialistas del mercado local se mencionó que el país deberá asumir un costo mayor a los cuatro mil millones de dólares para cerrar con los acreedores y lograr un canje que en el tercer cierre sea considerado "existoso". Hay que recordar que la propuesta original del Ministerio de Economía fue una quita de intereses del 62 por ciento, de capital del 5,4 por ciento y tres años de gracia.
AG CP
