No todos los sectores entonan la misma canción a la hora de evaluar el impacto de las medidas económicas que va tomando la flamante gestión de Javier Milei en su primera semana en el poder. Hay un denominador común: se augura una caída en el nivel de actividad que complicaría el desempeño 2024 y la profundidad de la recesión y su duración es lo que todos miran atentamente.
El primer número que se conoció surgió del banco estadounidense JP Morgan que, en un informe reservado para sus clientes, reveló que el impacto de las medidas implicaría una caída del nivel de actividad de 3% para 2024. Y todo el empresariado local se puso en alerta.
En un comunicado de prensa, la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) advirtió que las nuevas medidas económicas podrían generar una "fuerte caída de la actividad" y, en consecuencia, las pymes registrarían "un déficit económico difícil de sostener".
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El economista desarrollista y ex representante de la Argentina ante el BID, Federico Poli, fue directo. “El ministro anunció básicamente fuertes medidas fiscales de emergencia para evitar seguir en esta dirección que iba derecho a una híper”; sin embargo consideró que “faltan detalles de implementación importantes y fundamentalmente que anuncie un programa económico global de estabilización y desarrollo (política financiera, política cambiaria, política de ingresos, política externa)” y enfatizó que “deberán incluirse medidas de alivio a los sectores vulnerables, incluidas las PYMES”.
“Creo que en el encuadre en un programa económico global es necesario que, con ese encuadre macro, el Gobierno anuncie, inmediatamente, una ley de incentivo de inversiones y modernización del marco laboral para que permitan el dinamismo a la inversión privada y al empleo genuino”, sintetizó.
En cuanto a las inversiones de infraestructura que son una asignatura pendiente pero podrían demorarse dado el parate que se anunció en cuanto a la obra pública, hay mucha preocupación en el mercado energético, en especial por la demanda que debería sostener el nivel de actividad económica que el Gobierno espera crezca.
Cuándo comenzaría la recuperación económica
A contramarcha de estas perspectivas, el gobierno apuesta a que una vez reacomodados los precios en el primer trimestre, comiencen a verse síntomas de leve recuperación entre abril y mayo. Sería importante para cambiar el humor social y también para generar más ingresos fiscales y, así, poder empezar a gastar algo más desde el Estado por el aumento de los ingresos.
La infraestructura y la energía serán columnas verticales. Por eso, el ministro de Infraestructura, Guillermo Ferraro, convocó a autoridades de diferentes cámaras empresariales para buscar un nuevo esquema destinado a obras públicas. Por tal motivo, el titular de la cartera se reunió con las autoridades de la UOCRA, UIA, ADEBA, SRA, CAMARCO, CAC y la Bolsa de Comercio; miembros del Consejo de Políticas de Infraestructura, "a fin de articular el sector público con el privado y lograr la participación de las empresas en la ejecución y financiamiento de grandes obras y proyectos", señaló el Ministerio de Infraestructura en un comunicado.
Cada obra es un mundo
Hay algunas que están en veremos y desde el Instituto Gral. Mosconi advierten sobre tres ejes claves. Gabriel Rabinovich, vicepresidente señaló que “hay algunas obras como el gasoducto norte que de no concluirse provocarían un eventual colapso y es urgente evitar el desabastecimiento energético para recuperar los niveles de actividad económica”. En este sentido consideró que “durante el primer semestre del 2024 podría haber riesgo de cortes (tanto residenciales como grandes usuarios) por las tensiones de la salida de un mercado energético totalmente regulado”.
LM / Gi
