Con una gran herencia familiar, desde el estudio jurídico, remarcan como afecta en las sociedades la inmoralidad frente a las instituciones. “En nuestra larga trayectoria profesional advertimos que, en la República Argentina, existe la costumbre de pervertir nobles entidades que nos fueron dadas por hombres de inspiración igualmente noble y de gran lucidez y honestidad”, afirman desde el estudio.
Conformado por los Dres. Ernesto Ramón Gavier, Angélica Gavier y Andrea Celiz, el estudio está dedicado principalmente al derecho privado patrimonial y al derecho constitucional, cada vez con mayor gravitación directa en las relaciones jurídicas.
“En el transcurso del tiempo algunas cosas cambiaron. Cambio el modo de ejercer el poder y cambió el modo de ejercer las actividades productivas, comerciales, incluso profesionales. Así en el tema que nos ocupa vemos que frecuentemente se crean sociedades con capitales ínfimos”.
Con el objetivo de sacar ventajas, esta patología se extendió de manera epidémica en nuestra región. “Bendecida por la fertilidad de sus tierras, se conformaron empresas organizadas como sociedades comerciales. Dedicadas a comercializar productos agrícolas, su meta principal era la de evadir las cargas impositivas, y cubrir con ese manto jurídico, la responsabilidad de sus administradores”, aseguran.
Por ello, en el estudio tienen como sustento fundamental el capital social. Esta es la base fundamental de las sociedades comerciales para su existencia sumado a el cumplimiento de su objeto, garantía a terceros y al estado. Sin embargo, en la actualidad y de manera concreta sufre perversión que lo transforma en una herramienta para el fraude.
“La tendencia de pervertir instituciones concebidas para la producción o el comercio, genera verdaderas patologías sociales, que en definitiva atentan contra el progreso y la seguridad jurídica”, cuentan los abogados que recalcan que hoy en día no hay normativas para combatir estos hechos. “El nuevo Código Civil y Comercial no mejora esta situación, y las exigencias de registración varían en cada provincia y en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires”.
“Siendo que el capital social además de posibilitar la realización del objeto social, es garantía hacia los terceros que se relacionan con la sociedad, y ante el estado, debería tener una regulación más clara y precisa en todo el país”, afirman desde el estudio.
Ernesto R. Gavier Abogado M.P.: 3-35035 Mat. Federal: T: 61 F: 618 Tel: 03537 415 232 Sarmiento 151 X2550FOA BELL VILLE (Cba.) egavier@ nodosud.com.ar egavier@fibertel. com.ar
