El presidente venezolano, Hugo Chávez, que se encuentra en Cuba en tratamiento contra un cáncer, afirmó el martes por la noche que "no interferirá" en la agenda del Papa y del presidente Raúl Castro en La Habana, a la vez que anunció un almuerzo en la tarde con el líder Fidel Castro.
El Papa "es un jefe de Estado, yo soy un jefe de Estado, Raúl (Castro) es un jefe de Estado, ellos tienen su agenda, no voy a estar interfiriendo para nada, sólo saludo a Benedicto XVI y saludo su presencia en esta Cuba amada", dijo Chávez.
Sin embargo, el periodista venezolano Nelson Bocaranda Sardi, cronista que sigue de cerca la gestión y salud del presidente bolivariano, informó de manera extraoficial que una breve reunión logró producirse entre el jefe de la Iglesia Católica y el mandatario.
"La reunión no duró más de 5 minutos, sólo estando presentes los hermanos Fidel y Raúl Castro, Su Santidad y el Presidente Chávez, quien recibió los deseos papales por su pronta recuperación así como la bendición solicitada. El Santo Padre le regaló un rosario bendito al enfermo barinés. No supe si Chávez le hizo algún obsequio", detalló Bocaranda.
Previo a esto, durante su comparecencia en la televisión venezolana, Chávez había comentado sobre la visita del Papa y aplaudió "la importancia que le da la Iglesia católica a Cuba". "De qué manera el pueblo cubano, con qué respeto, con qué devoción ha recibido a Su Santidad Benedicto XVI", señaló Chávez, de 57 años y en el poder desde 1999.
Bocaranda explicó: "El compromiso acordado era un encuentro breve limitado, para darle la Bendición Apostólica, haciendo énfasis que no tuviera cobertura mediática. Este punto fue cumplido a cabalidad por las tres partes involucradas como era nuestro gobierno y los de Cuba y la Santa Sede".
De momento, el Papa Benedicto XVI ya arribó a la enorme Plaza de la Revolución de La Habana, lugar de manifestaciones del régimen comunista cubano, para celebrar la segunda misa pública de su visita de 48 horas a Cuba. En 1998, en ese mismo lugar en presencia de Fidel Castro, Juan Pablo II, el primer papa que visitó la isla, celebró una histórica misa en que pidió que "Cuba se abra al mundo para que el mundo se abra a Cuba".
Luego del oficio religioso, el Papa debe reunirse con el padre de la revolución cubana, Fidel Castro, antes de marcharse de la isla a las 17, poniendo fin a una gira de seis días por México y Cuba, el primero que realiza por naciones latinoamericanas de habla española.