La señal estatal norcoreana KCTV transmitió el viernes el testimonio de un ciudadano sobre la condición "demacrada" de Kim Jong-un. Este movimiento fue considerado inusual y no hizo más que alimentar las dudas sobre la condición de salud del líder.
Dicho comentario público se produjo después de que los observadores de asuntos norcoreanos notaran a principios de junio que Kim parecía haber estado perdiendo peso de manera espectacular, alejándose de aquella reconocida imagen que ostentaba.
"Ver al respetado secretario general Kim Jong-un demacrado rompe mucho el corazón de nuestra gente", precisó el hombre en una corta entrevista, según evidenciaron reportes de los medios de prensa de Seúl, mientras observaba una imagen del líder.
Durante el reportaje, los residentes de Pyongyang fueron filmados mirando una gran pantalla con fotografías de un concierto al que asistieron Kim y funcionarios de alto nivel después de una reunión plenaria del Partido de los Trabajadores.
Los analistas locales creen que el gobierno está usando la apariencia del líder norcoreano para retratarlo como un secretario general "dedicado y trabajador", mientras el país lucha por enfrentar su severa crisis alimentaria y muchos otros desafíos.
Corea del Norte cerró sus fronteras en enero de 2020 para protegerse de la pandemia Covid-19, reduciendo el comercio con China, que sigue siendo su aliado y socio histórico, mientras que los trabajadores humanitarios internacionales abandonaron el país.
Las primeras especulaciones sobre la salud de Kim estallaron después de que el líder no estuviera presente en la conmemoración del cumpleaños de su abuelo Kim Il-sung, el fundador del estado, por querer ausentarse de la vida pública durante unos 20 días.
El padre del "joven general", Kim Jong-il y el abuelo Kim Il-sung, también eran obesos, fumadores y amantes del alcohol. Ambos murieron de infartos debido a enfermedades crónicas y vidas extremadamente desordenadas.
En 2016, la inteligencia surcoreana informó que el líder había aumentado de peso y alcanzado los 130 kilogramos, 40 kilos por encima de los que tenía al inicio de su mandato en 2011. En 2020, las estimaciones eran de otros 10 kilos aumentados.
Sin embargo, cuando Kim reapareció en los medios estatales a principios de junio, analistas de NK News, lograron notar que la correa de su reloj parecía estar más floja alrededor de la muñeca, lo cual pareció ser un claro indicio de una baja de peso.
JFG
