El CEO de Pfizer, Albert Bourla, se enfermó de Covid-19 luego de haber recibido las cuatro dosis de la vacuna que produce el laboratorio que él mismo preside.
“Me gustaría informarles que he dado positivo por #COVID19. Estoy agradecido de haber recibido cuatro dosis de la vacuna Pfizer-BioNTech, y me siento bien aunque experimente síntomas muy leves”, explicó el ejecutivo en su cuenta de Twitter.
Bourla, de 60 años, aseguró además que está aislado, y que empezó a recibir un tratamiento con Paxlovid, la píldora antiviral que desarrolló Pfizer para casos de Covid leves a moderados. Este fármaco se recomienda sobre todo en casos de personas con riesgo a desarrollar formas graves de la enfermedad.
“Hemos llegado tan lejos en nuestros esfuerzos para combatir esta enfermedad que confío en que tendré una pronta recuperación. Estoy increíblemente agradecido por los esfuerzos incansables de mis colegas de Pfizer que trabajaron para que las vacunas y los tratamientos estuvieran disponibles para mí y para las personas de todo el mundo”, agregó el CEO de la compañía.
Si bien explicó que Paxlovid no está aprobado, aclaró que sí “está autorizado para uso de emergencia por la FDA”, el ente regulatorio de comidas y medicamentos de Estados Unidos.
Su uso se autorizó “para tratar el COVID-19 de leve a moderado en pacientes de alto riesgo mayores de 12 años, que pesen al menos 40 kg, con resultados positivos en las pruebas virales de SARS-CoV-2”, sumó Bourla.
Pacientes que recaen en COVID-19 tras tomar la píldora de Pfizer, pueden tomar más
Joe Biden también tuvo un tratamiento con Paxlovid
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dio positivo de Covid-19 el pasado 21 de julio, y recibió un tratamiento con la misma píldora antiviral de Pfizer.
Vacunado con las dos dosis iniciales y las dos de refuerzo del mismo laboratorio, Biden fue aislado ante el diagnóstico positivo. El médico de la Casa Blanca decidió indicarle el tratamiento, que actúa reduciendo la capacidad del virus para replicarse, lo que ralentiza el avance de la enfermedad.
Para ser eficaz, debe administrarse los días inmediatamente posteriores a la aparición de los síntomas y se recomienda en Estados Unidos para personas con riesgo de desarrollar un caso grave de la enfermedad, categoría en la que entraba el presidente estadounidense por su edad.
