El avión que llevaba a la princesa holandesa, Máxima Zorreguieta, quien viajaba junto a su esposo Guillermo, realizó un aterrizaje de emergencia en Nueva Zelanda por la sospecha de un principio de incendio en la máquina. Ambos pudieron tomar otro vuelo para continuar con su viaje.
Según informa un despacho de la agencia EFE, el piloto de la aeronave decidió regresar a la ciudad de Nelson, donde había partido hacia Wellington, debido a que olió humo en el aparato.
Las primeras especulaciones indican que el sistema de aire acondicionado del Jetstream 32 no funcionaba correctamente, aunque la información aún no fue confirmada.
Es para tener en cuenta que la argentina está embaraza de cuatro meses. Junto a su esposa se encuentra de visita oficial por Australia y Nueva Zelanda.