A cuatro días del referéndum revocatorio, el presidente boliviano Evo Morales eligió hoy su bastión de El Alto para cerrar la campaña por el “sí” a la continuidad de su mandato, luego de que la oposición a la realización de la consulta le impidiera visitar Tarija, Sucre, Santa Cruz de la Sierra y Trinidad la semana pasada.
Morales, acompañado de su vicepresidente, Álvaro García Linera, y varios de sus ministros, asistió a la última concentración en El Alto, adonde mantiene un respaldo de un 80 por ciento, según distintas encuestas.
El mandatario indígena coreó estribillos "contra el neoliberalismo y el imperialismo", bailó música andina y recibió el afecto popular que buscaba tras el desaire recibido en los departamentos opositores.
" Los prefectos hacen dictadura civil tomando los aeropuertos, esas logias intentan frenar este proceso de cambio. Al pueblo sólo le salvar el pueblo", dijo Morales a 4.100 metros de altura, mientras caían pequeños copos de nieve.
El presidente reiteró que el próximo domingo estarán en debate dos modelos económicos, uno de recuperación de los recursos naturales y otro de privatización de las empresas públicas.
"Hay familias (ricas) que no aceptan la igualdad entre los bolivianos. Todos los bolivianos debemos tener los mismos deberes y derechos", dijo.
Morales también criticó a los prefectos opositores que realizan una huelga de hambre para exigir la recuperación de todos los ingresos por el Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH), utilizado por el gobierno para el pago de una renta de vejez a mayores de 60 años.
"No están en huelga de hambre por el IDH, están contra el referéndum, contra el pueblo y la democracia. Pero el domingo ser n derrotados los prefectos neoliberales", aseveró el mandatario.
Triunfalista, Morales dijo que a las encuestas que señalan 59 por ciento de los bolivianos votará por el "sí" a su continuidad. "La derecha racista y fascista sabe del avance de la conciencia del pueblo boliviano", sostuvo.
El Alto, con casi un millón de habitantes, la mayoría de origen aymara, es la segunda ciudad más poblada de Bolivia, después de Santa Cruz de la Sierra.
"El Alto es valeroso, combatiente y responsable del quehacer político, económico, social, cultural y estructural de Bolivia", dijo Morales.
Unas 30.000 personas asistieron a la mayor concentración que respaldó a Morales de cara al referéndum, un evento que aún tiene la sombra de la incertidumbre por la tenaz resistencia que existe en los departamentos de la llamada "medialuna" (Santa Cruz, Beni, Pando y Tarija).
Fuente: DPA