40 fotos: el último adiós a Isabel II en Edimburgo, primera escala de su largo funeral
El silencio y la solemnidad reinaron en el traslado desde el palacio de Holyrood hasta la catedral de St. Giles, que no veía un funeral real desde el siglo XVI. El ataúd de la reina, fallecida a los 96 años, permanecerá allí durante 24 horas.
Funeral de la reina Isabel II de Gran Bretaña en Edimburgo (Escocia) |
AFP
El ataúd de la reina Isabel II de Gran Bretaña se cubrió con el estandarte real, la corona de los reyes de Escocia y una corona de sus flores favoritas para reposar durante 24 horas en la catedral de Edimburgo, en el primero de los siete días de honras fúnebres oficiales.
Las gaitas tocaron el himno nacional británico cuando el cortejo salió del Palacio de Holyrood escoltado por los cuatro hijos de la reina: el nuevo rey Carlos III, la princesa Ana, el príncipe Andrés y el príncipe Eduardo. La reina Camilla siguió la procesión en un automóvil.
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El rey, la princesa Ana y el príncipe Eduardo vestían galas militares, pero no así Andrés, considerado el "hijo predilecto" de Isabel II pero que fue despojado de sus honores militares a raíz de acusaciones de abuso sexual en EEUU, que se cerraron con un acuerdo extrajudicial.
El coche fúnebre fue escoltado por un grupo de portadores del Regimiento Real de Escocia y la Guardia del Cuerpo del Rey de Escocia, mientras la policía montada con traje ceremonial cabalgó al frente del desfile. Francotiradores se ubicaron a lo largo de todo el recorrido hasta la catedral.
Dentro de la catedral, la primera ministra Liz Truss, que asumió el cargo hace menos de una semana, y la premier de Escocia Nicola Sturgeon dejaron de lado sus diferencias políticas y participaron del servicio religioso en memoria de la reina.
El reverendo Iain Greenshields, de la Iglesia de Escocia, elogió la "vida extraordinaria" de Isabel II y dijo que "comenzó su reinado, como el rey Salomón al pedir sabiduría, algo que demostró en gran medida". Destacó su "deber, honor, compromiso y fe", diciendo que "estas son las palabras que buscamos hoy para describir la vida y el reinado de la reina Isabel".
"La mayoría de nosotros no podemos recordar un momento en que ella no fuera nuestra monarca", dijo el reverendo. "Comprometida con el papel que asumió en 1952 tras la muerte de su amado padre, ha sido una constante en nuestras vidas durante 70 años".
Después del servicio fúnebre de himnos y oraciones, la capilla ardiente quedó abierta durante 24 horas y se espera cientos de escoceses presenten sus respetos ante el catafalco en la catedral de St. Giles, construida en en torno al año 1124 en honor al santo patrón de la ciudad de Edimburgo.
La corona de los reyes de Escocia, creada en el siglo XVI para el rey James V, fue colocada sobre el féretro por el duque de Hamilton y Brandon, el principal noble de Escocia. Le fue entregada a la reina en 1953, pero nunca la usó sobre su cabeza.
La reina falleció el jueves a los 96 años en el Castillo de Balmoral, residencia privada de veraneo en Escocia. Desde entonces, el país se prepara para despedirla en un funeral de Estado que tendrá lugar el 19 de septiembre en la Abadía de Westminster, en el centro de Londres.
Siguiendo la tradición, el rey y sus hermanos deben participar en una vigilia por la difunta reina, que permanecerá en la catedral de Edimburgo hasta la tarde del martes. Después, un avión transportará sus restos a Londres para varios días de homenaje popular y el funeral de Estado.
Se estima que unas 750.000 personas podrían despedirse de la monarca en el Westminster Hall de la sede del parlamento, donde se prevén filas de hasta 30 horas de espera y una extensión de 8 kms, durante los tres días que la capilla ardiente estará abierta al público.
El estadounidense Joe Biden confirmó su asistencia al funeral, al que también asistirán los reyes de Bélgica y España, el emperador Naruhito de Japón y posiblemente el presidente brasileño Jair Bolsonaro, además representantes de las monarquías del mundo.
