Irán se propone una suerte de "Tinder islámico" para defender a la familia tradicional de los "ataques del Diablo". La aplicación Hamdam (Compañero/a en persa) tiene por objeto ayudar a jóvenes a "elegir un cónyuge" para "matrimonios duraderos y conscientes".
Por primera vez, una herramienta de ese tipo fue oficialmente aprobada por la República Islámica. El uso de cualquier otra plataforma extranjera similar, como Tinder, se considerará ilegal, advirtió el coronel Ali-Mohammad Rajabi, jefe de la policía en Teherán.
"La familia es el objetivo del diablo" y la capital de Irán intenta de esta manera "imponer sus ideas" y "crear uniones saludables", explicó también el director del instituto que desarrolló la aplicación de citas, Komeil Khojasteh.
Según los promotores, la nueva herramienta digital garantiza el respeto a la ley y a la tradición musulmana, monitoreando a los usuarios desde el momento en el que proceden a registrarse en la aplicación hasta su vida posterior luego de contraer matrimonio.
Asimismo, antes de poder crear la cuenta gratuita que les permite ponerse en contacto con posibles parejas, los usuarios deben identificarse a través de datos personales fidedignos y comprobables y hasta someterse a una "examen psicológico".
En caso de compatibilidad con la pareja, la misma aplicación pone "a las familias en contacto, en presencia de consultores". De esta manera, buscan evitar que se produzcan relaciones directas e inapropiadas entre jóvenes de distintos sexos.
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Las autoridades iraníes llevan mucho tiempo alertando sobre el aumento de la edad de los cónyuges en el momento de la boda y la disminución de los nacimientos. La tasa actual de crecimiento de la población se encuentra en torno a un 1,4%,
En marzo, el Parlamento de Teherán aprobó una norma de "crecimiento de la población y apoyo familiar" que compromete al gobierno a ofrecer importantes incentivos económicos para los matrimonios y parejas con más de dos hijos, a la vez que limita el aborto.
Este último está solo admitido por motivos terapéuticos en casos de malformación del feto o los riesgos para la salud de la madre. El texto aún debe ser aprobado por el Consejo de Guardianes, que es responsable del control constitucional de las leyes.
JFG
