Un barco turístico naufragó este sábado en Japón y dejó un saldo de diez personas fallecidas y otras 16 desaparecidas en las agitadas y glaciales aguas del norte del país asiático, según informaron los guardacostas de la zona.
“Confirmamos el fallecimiento del total de las diez personas halladas tras el naufragio del barco Kazu I”, precisó a AFP un portavoz de los guardacostas, quien detalló que aún persiste la búsqueda de los desaparecidos.
Las víctimas mortales fueron siete hombres y tres mujeres
A pesar de los pronósticos meteorológicos poco favorables, el Kazu I zarpó el sábado por la mañana con 26 personas a bordo con destino a bordear un flanco de la península de Shiretoko, un lugar declarado Patrimonio de la Humanidad por su naturaleza prístina, al noroeste de la isla septentrional nipona de Hokkaido.
“Era obvio que el estado del mar iba a empeorar y les dije que no salieran. Pese a todo, salieron”, relató el operador de otro barco turístico al canal de televisión NHK. El barco Kazu I envió un pedido de socorro a las 13:15, hora loca, del sábado y advirtió que se estaba hundiendo, con una parte inclinada a unos 30°.
La guardia costera arribó al lugar tres horas después y en estos momentos se encuentra trabajando intensamente en las labores de búsqueda junto a helicópteros policiales, militares y embarcaciones pesqueras locales.
El canal NHK publicó imágenes de un helicóptero y barcos patrulleros mientras estos exploraban el borde de la península, como así también de los socorristas en tierra rastrillando una costa muy accidentada, con altas olas estrellándose contra las rocas.
Dos de los pasajeros del barco eran niños
En el Kazu I viajaban 24 pasajeros, dos de ellos niños, y dos tripulantes. Todas las personas llevaban chalecos salvavidas, pero la baja temperatura de las aguas durante el día rondaba entre los 2 y 3 grados, a lo que se sumó el mal tiempo, el cual hizo regresar temprano a algunos de los barcos pesqueros.
“Estaba previsto que las olas fueran cada vez más altas. Yo no me hecho a la mar en esas condiciones”, señaló un trabajador del mismo sector turístico local a la agencia de noticias Kyodo.
El Kazu I ya había tenido una avería durante otra excursión en junio del año pasado tras golpear los fondos cerca de su puerto base, según indicaron medios japoneses. Este incidente no causó heridos, pero resultó en la apertura por parte de la policía de una investigación por negligencia de parte del capitán del barco.
La zona que visitaban en esta oportunidad, la península de Shiretoko, fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 2005 debido a su particular vida silvestre, que incluye animales en peligro de extinción y aves migratorias. Los barcos turísticos son muy populares entre los visitantes que buscan tomar contacto con esta naturaleza.
AS.
