INTERNACIONAL
En España

La fiesta ilegal que empezó la noche de fin de año y no se sabe cuándo termina: por qué no la desalojan

Más de 5.000 de personas de convocaron de manera clandestina en las afueras del municipio de Fuente Álamo de Murcia.

Rave en Fuente Álamo, Múrcia
Rave en Fuente Álamo, Múrcia | Twitter Un murciano y capturas de videos

Una multitudinaria fiesta electrónica clandestina que lleva más de cuatro días y convocó a más de 5.000 personas en la pequeña localidad española de Fuente Álamo, perteneciente a la Región de Murcia, puso en alerta a las autoridades. La "rave" comenzó en Año Nuevo y pretende seguir hasta Reyes.  Las autoridades decidieron no desalojara, pero impiden que más asistentes lleguen al lugar.

Se trata de la segunda edición de la "Big Fucking Party" (Gran P*** Fiesta), que ya se había llevado a acabo por primera vez en La Peza, Granada, entre el 30 de diciembre de 2022 y el 5 de enero de 2023. Mediante una convocatoria realizada por redes sociales, la idea de los organizadores es reunir a los amantes de este tipo de fiestas ilegales con varios días de duración, cambiando la ubicación todos los años.

Murió un joven en una fiesta electrónica en Costanera e investigan si consumió éxtasis

Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Hoy más que nunca Suscribite

En esta oportunidad, la fiesta aterrizó en el circuito municipal de carreras de esta localidad -marcada por un paisaje semidesértico-, que se encuentra a tres kilómetros de la pedanía de Los Paganes, de unos 200 habitantes, y a 38 kilómetros de Murcia capital.

Hace unos días, la Guardia Civil se desplazó hasta ese lugar, contabilizó al menos 5.000 asistentes, y empezó a impedir el acceso a más personas ya que se esperaba que convocara entre 10.000 y 15.000 fanáticos.

Rave en Fuente Álamo, Murcia

Sólo pasar a personas por privado y de confianza”, dice uno de los mensajes que fue enviado a un grupo organizado para asistir a distintas 'raves'. Teniendo en cuenta la duración de la fiesta, quienes participan lo hacen en casas rodantes e instalan tiendas de campañas o remolques. También se observan escenarios, puestos de comida y bebida, grandes parlantes y sectores para los DJ's.

Según lo consignado por fuentes municipales, un grupo de personas llegó el sábado pasado y rompió el cerrojo de la puerta principal del circuito para comenzar con los preparativos.

Rave en Fuente Álamo, Múrcia

Fuente Álamo, Murcia 20240103

Los primeros asistentes de diferentes puntos de España y de otros países de Europa comenzaron a llegar de a centenas en la mañana del último día del año, con el fin de recibir el inicio de 2024 y permanecer en ese enclave hasta el día de Reyes Magos.

 

Controles de alcohol y drogas

A modo de prevención, los uniformados realizan test de alcoholemia y de consumo de drogas a las personas que se marchan de las instalaciones en vehículos. Los asistentes permanecieron en tiendas de campaña y furgonetas y, en algunos de ellas, se registraron carteles donde se anunciaba la venta de sustancias ilegales.

Cien guardias civiles, más agentes de la policía local de Fuente Álamo, ayudados por la utilización de drones vigilan el perímetro. En ese marco, se informó que hay una persona detenida en la fiesta por tráfico de drogas

Rave en Fuente Álamo, Múrcia

Rave en Fuente Álamo, Múrcia

"La Big Fucking Party" de 2023 convocó a alrededor de 15.000 personas, y por ese motivo se comenzó a prohibir la llegada de más gente al lugar. El ambiente es festivo, con música en todos los sectores, pero las autoridades temen que pueda expandirse y, además de los bloqueos a los accesos, se registraron desvíos de tránsito.

No habrá desalojo

La delegada del Gobierno en la Región, Mariola Guevara, confirmó este miércoles que la fiesta ilegal no será desalojada.

"El objetivo principal de las dos administraciones es controlar esta situación, evitar la expansión y bloquear a los vehículos que intenten acceder”, expresó en una rueda de prensa.

La decisión estuvo sustentada porque, salvo por la detención, no se registraron inconvenientes ni quejas o denuncias de los vecinos más cercanos. Por ese motivo, la mayoría de las sanciones a los responsables serán administrativas.

En sintonía con Guevara, la alcaldesa de Fuente Álamo, Juana María Martínez, sostuvo: “Si hiciéramos ahora mismo un desalojo con las personas que hay, con el tipo de celebración, y bajo los efectos que están estas personas, se asumiría un riesgo bastante importante".

 

FP/LT