Un grupo de encapuchados que participaba de la marcha convocada por diversas agrupaciones de derechos humanos para conmemorar el 33 aniversario del golpe militar en Chile, lanzó ayer una bomba incendiaria contra el Palacio de La Moneda, generando importantes destrozos en la sede de la Casa de Gobierno.
Aunque el fuego de la bomba, que impactó en una ventana de la sede del gobierno fue apagado en pocos segundos, fuentes policiales dijeron que hubo daños de cierta consideración. Como consecuencia de los ataques hay al menos 18 heridos, tres funcionarios policiales.
El movimiento que generó los disturbios estaba identificado con las siglas CRA y también rayó los muros del palacio y atacó la sede del Banco Estado, quebrando los vidrios de la edificación, informa el diario chileno El Mercurio.
Además muchos de los locales comerciales ubicados en las cercanías del Palacio de Gobierno sufrieron importantes daños tras la manifestación y durante todo el desarrollo de la marcha se produjeron algunos enfrentamientos entre Carabineros y los encapuchados.
Consultada sobre los desmanes, la Presidenta Michelle Bachelet reiteró el llamado a la tranquilidad y dijo tras participar en el Te Deum Evangélico: "Yo pido que en Chile podamos hacer un recordatorio de las tragedias de una manera democrática y sin violencia".