Un tribunal en China confirmó este martes 10 de agosto, en segunda instancia, la pena de muerte al canadiense Robert Lloyd Schellenberg por tráfico de drogas, en el marco de la grave crisis diplomática entre Pekín y Ottawa por la detención de la directora financiera de Huawei, Meng Wanzhou.
Se trata del Tribunal Popular Superior de Justicia de la provincia nororiental china de Liaoning, que rechazó la apelación en segunda instancia de Schellenberg, condenado a pena de muerte en 2019 por haber introducido, junto con otros acusados, más de 220 kilos de metanfetaminas.
En enero de 2019, la justicia china hizo pública la sentencia de la pena capital, condena que llegó después de la repetición del juicio, a finales de diciembre de 2018 y principios de enero de 2019, por considerarse poco severa la pena anteriormente impuesta a 15 años de cárcel.
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De ese modo, el fiscal del caso recurrió la sentencia al asegurar que "las pruebas sugerían que Schellenberg había estado probablemente involucrado en tráfico internacional de drogas y desempeñado un papel clave en el tráfico de narcóticos". Según informó RFI, el tribunal decidió entonces repetir el juicio, en el que se habrían aportado nuevas pruebas incriminatorias.
De acuerdo con el Código Penal chino, cualquier persona que trafique, importe, transporte o manufacture opio en cantidades mayores a un kilo, o heroína en cantidades mayores a 50 gramos u otros narcóticos en grandes cantidades, deberá ser sentenciado a 15 años de cárcel, cadena perpetua o muerte, además de confiscársele sus bienes.
"Condenamos el veredicto en los términos más fuertes y apelamos a la clemencia de China", dijo a la prensa Dominic Barton, embajador de Canadá en China. "Hemos trasladado en varias ocasiones a China nuestra firme oposición a esta pena cruel e inhumana y continuaremos haciéndolo", agregó.
Tensión por la detención de Meng Wanzhou
La repetición del juicio se da en un contexto de gran tensión entre China y Canadá, dado que el 1 de diciembre de 2018, Canadá detuvo a la directora financiera de la empresa tecnológica china Huawei, Meng Wanzhou, de 49 años, a petición de Estados Unidos.
Meng, hija del fundador del gigante de las telecomunicaciones, Reng Zhengfei, se encuentra en prisión domiciliaria acusada de haber eludido las sanciones contra Irán, supuestamente mintiendo al banco HSBC sobre los vínculos entre Huawei y la subsidiaria Skycom, con negocios en dicho país.
Días después de la detención de la CFO, Pekín arrestó a un exdiplomático y a un empresario canadienses, Michael Kovrig y Michael Spavor, respectivamente, mantenidos desde entonces bajo custodia en China y acusados posteriormente de espionaje. El fallo de Schellenberg se produce un día antes de que la Justicia china anuncie su veredicto sobre Spavor.
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