Alejandro Cacace, dirigente radical, fue el primero en presentar un proyecto de ley proponiendo la dolarización, pero hizo eje en el cómo se administra esa transición monetaria. “Milei busca una dolarización espontánea, hecha por el mercado, y eso es riesgoso”, resaltó en Modo Fontevecchia, por Net TV y Radio Perfil (FM 101.9).
Usted en su momento planteaba dolarizar la economía, ¿coincide con la propuesta de Milei?
Se podría decir que él coincide conmigo, porque el único proyecto presentado en la Cámara de Diputados fue el mío. Él habla de la dolarización pero no ha presentado ningún proyecto que aclare cómo lo haría.
Coincidimos en que hay que darle estabilidad a la economía Argentina y en que usar el dólar como moneda le otorgaría esa estabilidad. Es importante ver cómo sería la forma de implementarlo. Yo, escuchándolo a él, deduzco que Milei busca una dolarización espontánea, hecha por el mercado, y eso es riesgoso, porque podría haber un salto muy brusco del tipo de cambio y una espiral inflacionaria.
La dolarización divide a la Argentina: ¿salida o entrada al laberinto económico?
El plan de dolarización que yo propuse en el Congreso está ordenado en ciertas etapas. Es lo que se llama una “dolarización oficial”, como lo hizo Ecuador, que le ha garantizado más de 20 años de estabilidad.
Coincidimos con Milei en la dolarización, pero hay que ver cómo se implementa. El diablo está en los detalles, dicen. No hay duda de que la dolarización sería la forma más rápida y efectiva de estabilizar la economía y controlar los precios.
¿La economía Argentina tiene espaldas para hacer la dolarización? Se supone que para eso tiene que haber espalda…
Se suele decir, como crítica, que faltan dólares para poder dolarizar, pero en Argentina no faltan dólares, porque exporta diez mil millones de dólares al año. Lo que pasa es que estos dólares después se pierden, se van del Banco Central, porque el Banco Central los “malvende”, los desperdicia.
Guillermo Moreno: "Si Perón estuviera vivo, a Milei lo haría peronista"
Un Banco Central que da el Dólar Soja a $300, pero después los vende a $200, pierde dólares constantemente. Obviamente, $216 no es un precio de equilibrio del dólar, nadie te vendería, mano a mano, un dólar a ese precio. Eso lleva a que se pierdan reservas constantemente.
Cristina Kirchner dice que hay un deporte contra las reservas del Banco Central, pero la realidad es que se están rematando los dólares a los exportadores y los Bancos. Si a mí me ofrecen dólares a $216, yo también querría comprar todos los que haya. Eso es lo que lleva a que terminen faltando dólares, no es porque la economía no los tenga, sino porque se hace una mala gestión de ellos.
Decir que faltan dólares es un diagnóstico equivocado, más bien tenemos un Banco Central que “rifa” los dólares.
Carlos De Angelis: "Cristina Kirchner está operando por omisión"
Alejandro Gomel (AG): Algunos diputados han criticado la dolarización. Itai Hagman dijo que esto implicaría una devaluación brutal, licuar salarios y jubilaciones y que la Argentina pase a depender de la Reserva Federal de Estados Unidos. ¿Se puede evitar esto que plantea Hagman en su proyecto?
La devaluación ocurre constantemente. Ahora el dólar está en $420 y eso es devaluación.
Cuando presenté este proyecto, hace casi dos años, me decían que “si dolarizamos, el dólar se irá a 400 pesos, es una locura”, y hoy el dólar ya está a 400 pesos y no hemos hecho ninguna dolarización.
Vamos perdiendo oportunidades por evitar la devaluación y resulta que estamos devaluando todos los días y cada vez más. El FMI plantea que tenemos un atraso cambiario y que hay que ajustar para arriba. Critican la dolarización con el cuco de la devaluación y resulta que la devaluación ocurre todos los días.
Segundo, la autonomía monetaria. Hoy no tenemos autonomía monetaria. Si la Reserva Federal eleva las tasas de interés, impacta de lleno en la economía Argentina, eso no lo mira nadie. Estamos dentro de un contexto internacional en el que las decisiones de los países centrales nos afectan, no somos una isla.
La dolarización divide a la Argentina: ¿salida o entrada al laberinto económico?
Se quejan de que perderíamos la autonomía monetaria, elevándola a un estatus sagrado. Claro que la perderíamos si dolarizamos, pero no hemos hecho nada bueno con nuestra autonomía monetaria.
Desde que se creó el Banco Central, en 1935, hemos tenido más inflación que antes que hubiera Banco Central. Hicimos una institución para defender la moneda y lo menos que hizo fue defenderla.
Las únicas dos veces en la historia argentina que tuvimos largos periodos de estabilidad fue cuando no tuvimos moneda propia, porque tuvimos una caja de construcción, a fines del siglo XIX hasta la gran depresión, o la convertibilidad que hizo Menem durante los ‘90.
Cada vez que hemos tenido autonomía monetaria hemos tenido inflación. Les aseguro que la ciudadanía prefiere tener estabilidad. Poder ir al supermercado todas las semanas y que las cosas cuesten más o menos lo mismo, que no haya aumentos constantes.
En medio de una crisis interna, el Gobierno le apunta al campo por una presión devaluatoria
Yo recuerdo cuando se hizo la adopción del Euro en Europa, en países como Italia se debatía que era perder autonomía. Cuando terminaron adoptando el Euro y vieron que se terminaban los problemas de inflación que tenían con la Libra y la Peseta, nadie se volvió a acordar de la autonomía monetaria.
AG: ¿Una emulación de eso no sería, por ejemplo, una moneda común con Brasil?
Sí. Lo que ocurre es que la moneda común lleva años en poder coordinarse, porque hay que acompasar las variables económicas de los distintos países, y nosotros necesitamos resolver la inflación hoy. Tenemos un problema de más de 100% de inflación hoy que hay que estabilizar drásticamente y por eso propongo la dolarización.
El problema de la moneda común es ese tiempo que lleva. Llegar en algún momento a adoptar una moneda común sería positivo en la medida en que sea otro banco central y no el argentino el que la regule.
Claudio Mardones (CM): Existe una preocupación con el escenario cambiario empeore de una forma estrepitosa, si es que Milei cosecha una buena adhesión en las PASO. ¿Cómo ubica la pertinencia de la dolarización en este escenario, teniendo en cuenta además que Juntos por el Cambio no ha definido programa económico y sigue sobrevolando la idea del “shock”?
Creo que la necesidad de estabilización es urgente. Eso implica medidas de corte monetario y de corte fiscal, la reducción del déficit.
Juntos por el Cambio tiene distintas ideas, según los candidatos que se han propuesto, que tienen visiones distintas. Todos coinciden en que tiene que haber una consolidación en el aspecto fiscal, aunque por ahí hay distintas opiniones respecto a cuánto de shock tiene que haber en lo monetario.
Yo creo que en la situación de Argentina, con una inflación de tres dígitos, los programas clásicos de estabilización no alcanzan. Programas como el de Israel, Perú, Uruguay, requieren 6 u 8 años de implementación. Años en los que el Banco Central y el Gobierno mantengan una conducta monetaria impecable.
Milei contó qué haría con la inflación, y se puso del lado de Macri en la pelea con Larreta
Estamos en una situación particular, con una inflación de tres dígitos y con la gente que ya no confía en su propia moneda, se buscan desprender de los pesos y compran dólares donde pueden, en el dólar ahorro, en el arbolito o donde sea. Bajo esta situación, un programa clásico de estabilización no va a funcionar.
Lo que va a ocurrir es que, al poco tiempo, alguna de las variables se va a desacomodar, no se va a cumplir la meta de déficit que se proponga, y la moneda se va a volver a devaluar y perder fuerza. Hace falta una medida mucho más radical de estabilización, que es adoptar una moneda extranjera.
Propongo el dólar porque es la moneda que los argentinos ya usan y confían, no por un tema de geopolítica, podría ser lo mismo con el Euro o con otra moneda.
FM JL