El representante diplomático en Brasil, Daniel Scioli, dialogó con Jorge Fontevecchia para Modo Fontevecchia, por Radio Perfil (FM 101.9), y analizó el panorama electoral en Jair Bolsonaro y Lula da Silva. Además, cómo está la interna en el Frente de Todos.
¿Estás invitado al casamiento de Lula?
No, pero le deseo la mayor felicidad en un momento importante para su vida. Lula desparramó esperanza y compromiso para encausar a Brasil por otro sendero. Veremos lo que dice la gente, falta un tiempo, pero es una elección que hay que seguir con mucha expectativa y esperamos lo mejor para un gran país. Si Brasil crece es bueno para Argentina, porque tenemos una agenda de colaboración que va a necesitar de una articulación cada vez mayor, como lo hemos hecho ya.
Lula lanzó su campaña para “reconstruir” a Brasil
Sos testigo de una de las campañas más interesantes, con el regreso de Lula. ¿Qué diferencias encontrás entre las elecciones de Brasil y las de Argentina?
En las últimas elecciones se vio una profunda grieta. Cuando parecía que iba a emerger una tercera vía, no se logró. La campaña va camino a una gran final entre Jair Bolsonaro y Lula. El escenario que tiene Bolsonaro es distinto al de 2018, cuando aprovechó la implosión de los partidos tradicionales y el Lava Jato. Ahora lleva cuatro años de gobierno y se verá si es capaz de recuperar expectativas para renovar la confianza.
Lula apunta al eje social e industrial de su gestión anterior, con el desafío de que su partido político fue teniendo un desgaste natural después de mucho años de gobierno y ahora piensa en el segundo turno, es decir, en una segunda vuelta. La elección de su vicepresidente va en ese sentido. Bolsonaro trata de insertarse en las bases sociales de Lula y el expresidente va más al centro. Más allá del resultado, hablé con los dos porque tenemos que integrarnos en sectores estratégicos, en un contexto de guerra entre Rusia y Ucrania, y el desafío es mejorar eso. Acá me han presentado como delegado obrero en Brasil, defendiendo el trabajo y llevando inversión.
La edad de Lula, ¿motiva a personas como Cristina Kirchner para ser candidata en las próximas elecciones presidenciales?
Creo que no. Las veces que lo vi a Lula transmite vitalidad y sabiduría, desde la experiencia, el dolor y la desgracia. Es un aprendizaje constante y Bolsonaro también estará evaluando ahora qué mensaje enviará al pueblo brasilero para renovar la confianza.
En cada posición que ocupaste en política encontraste la manera de destacarte. ¿Cómo sigue tu carrera política?
Con repasar mis inicios encontrás que, cuando la gente me dio la confianza, puse el máximo esfuerzo y me renovaron la confianza. Me ocupé de las pymes, el deporte, el turismo, la vicepresidencia del país, la gobernación de la provincia de Buenos Aires y cuando Alberto Fernández me dio la posibilidad, me focalicé en eso. En lugar de hacer un trabajo tradicional, le di una impronta ejecutiva y comercial para mejorar la relación entre Argentina y Brasil y así se lograron avances impensados. Se verá desde dónde puedo ayudar al país, pero no puedo hacer conjeturas.
¿Hablaste con Cristina Kirchner recientemente?
Sí, hablé con Cristina y con Alberto. Ya lo dijo ella, aquí no hay pelea. El propio ministro de Economía, Martín Guzmán, marcó un camino hacia el futuro que tiene sus etapas y grandes obstáculos, como la pandemia. El Estado hizo un gran esfuerzo y se ve la recuperación del país.
JL PAR